Un terremoto de 2,9 grados en la escala de Richter se dejó notar, y mucho, en la noche de ayer en las localidades de Sueca y Cullera y también en el Saler. Según han informado fuentes del Instituto Geográfico Nacional (IGN), el movimiento sísmico se produjo a las 22:16 horas y tuvo su epicentro en el mar, a unos 12 kilómetros de profundidad en la zona marítima del municipio de Sueca, entre las playas de Les Palmeres y El Perelló, a unos 30 kilómetros al sur de la ciudad de Valencia.
Los que más claramente notaron los temblores fueron los residentes en los edificios altos de la primera línea de playa de Cullera que sintieron vibraciones en el suelo aunque después, ya sobre las 22.30 horas, los vecinos de El Saler también percibían los movimientos provocados por el seísmo dentro del mar en las viviendas más próximas a la costa valenciana. En ninguno de estos casos se han tenido que lamentar daños físicos ni materiales.
Fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias han indicado que sólo se recibieron 6 llamadas de vecinos que habían notado alguna vibración o ligeros movimientos de lámparas.
Únicamente en El Palmar un grupo de vecinos salió alarmado a la calle tras notar las vibraciones, aunque regresaron poco después a sus domicilios al comprobar que no se habían registrado daños, según las fuentes.
Una hora después, sobre las 23.00 horas, se produjo una réplica en el término de Sollana, población limítrofe con Sueca, de magnitud 2 y epicentro en el mar a 17 metros de profundidad, aunque no ha producido daños personales.
