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Patrimonio

Piden la recuperación de la cúpula de la antigua Paduana

Es una imponente vidriera hermana de la del hotel Palace de Madrid que se salvó del derribo del Palacio Vilaragut de Valencia y fue a parar a Ontinyent

Piden la recuperación de la cúpula de la antigua Paduana

Una reseña del historiador de Ontinyent Pepe Gandia trae al recuerdo de los vecinos de nuevo la cúpula de la antigua fábrica textil Paduana, emblema del esplendor industrial de la Vall. Gandia, desde la Plataforma per la Defensa del Patrimoni d'Ontinyent, se preguntaba días atrás por el estado de conservación de la pieza y por su localización: fue donada al ayuntamiento en 2006 con el compromiso de que fuera custodiada y la finalidad de encontrarle una futura ubicación. Pero nadie sabe más cosas concretas ni el nivel de conservación de un elemento decorativo imponente, que pertenecía al palacio Vilaragut de Valencia y que es hermana de taller de cúpulas de vidrio tan relevantes como la del edificio de Correos de Valencia o la del hotel Palace de Madrid.

Según Gandia, al derribar la fábrica la cúpula fue desmontada «y embalada correctamente en cajas de madera». Parece que «posteriormente quedó depositada en alguna dependencia o almacén municipal. Sabíamos„añade„ que había sido donada al ayuntamiento cuando se estaba reformando la casa Torrefiel para ubicar allí dependencias municipales. Incluso se previno dejar preparado el lugar donde podían colocarla. Esta idea inicial se desestimó, no sabemos bien por qué, y la cúpula continuó en su sitio hasta el derribo final del resto de las instalaciones. Ahora no es lo más importante, pero parece que problemas derivados de su titularidad efectiva o de su estado de conservación podrían estar detrás de que finalmente no se colocará en el nuevo ayuntamiento».

La Plataforma per la Defensa del Patrimoni d'Ontinyent cree que la pieza es lo suficientemente valiosa como para sugerir y recomendar, primero que nada su salvaguarda y, después, que se le encuentre una ubicación a la altura de su importancia histórica.

La cúpula, «en contra de lo que apuntaba una antigua ficha del PGOU de Ontinyent errada o de algunas informaciones aparecidas, ni formaba parte del Palacio del embajador Vich ni del Palacio del Marqués de Dos Aguas; ambos en Valencia: tiene como procedencia el Palacio de los Vilaragut de la capital valenciana», explica Gandia. «Este palacio renacentista del siglo XV, tras el paso de los años, fue utilizado durante XX por diversas entidades: sede provisional del Banco Hispano Americano hasta la inauguración de la sede oficial de la calle Barcas, en 1925; sede del Frente de Juventudes en la posguerra o de la famosa Academia Castellano. Ocupaba la actual plaza de Rodrigo Botet, señala Gandia. El caso „añade„ es que en 1935, ya en un estado bastante avanzado de deterioro, el inmueble fue adquirido por Joaquín Sendra. En los años 50, la familia Sendra construyó en el solar del antiguo palacio, derribado, el posteriormente muy afamado hotel Astoria Palace, que aún pervive. Una de las hijas del comprador estaba casada con José Simó Aynat, que participó en la iniciativa hotelera junto a Juan Sendra y sus hermanos. Gestiones personales de José Simó (copropietario de Paduana) hicieron posible que la cúpula se salvara y fuera trasladada a Ontinyent para colocarla en el vestíbulo de la gran fábrica.

«Sólo por su origen, el Palacio de los Vilaragut, como por haber estado ligada durante más de 50 años a una de las empresas emblemáticas de la industria textil como fue Paduana, ya merece ser tratada como bien patrimonial», apunta desde la plataforma Gandia.

La cúpula tiene unos cien años; fue instalada en el Palacio Vilaragut a principios del siglo XX. «Gracias a una información que hemos encontrado recientemente, al releer viejos papeles sobre Paduana y en especial un trabajo de Montiel Balaguer que en una nota a pie de página nos puso sobre la pista, pensamos que hay aún más razones para hacer valer la cúpula», insiste Gandia. Según explica, una inscripción que figura en uno de los cristales apunta a que se trata de una obra hecha por Maumejean Hermanos, una de las empresas más importantes en obras de este tipo. «Era de origen francés y se instaló en España en1898. Tan importantes eran sus piezas que hay actualmente una Sala Maumejean en el museo de la Real Fábrica de Cristal de La Granja (Segovia), que acoge uno de los fondos más importantes conservados por el Centro Nacional del Vidrio», añade. Entre las obras de los Maumejean están la cúpula de Correos; en Valencia; la del vestíbulo del Ayuntamiento de Valencia (restaurada en 2018); las vidrieras de la Basílica de la Virgen de los Desamparados, también en la capital, o la imponente cúpula del hotel Palace de Madrid... ¡Casi nada!», exclama este experto.

¿En el futuro Museu del Tèxtil?

Para la plataforma, «el primer requisito es que se custodie adecuadamente y así evitar cualquier sorpresa desagradable. Hay que pensar que muchas de las piezas seguro que necesitan una restauración, y la empresa Maumejean continúa en activo. Es una posibilidad», desliza Gandia. «Por otro lado, hay que considerar las diferentes posibilidades de encontrarle un destino adecuado. ¿Es posible todavía pensar en colocarla en el patio central del ayuntamiento, con los ajustes necesarios?», se pregunta. «¿O en el futuro Museu del Tèxtil estaría mejor?». Gandia pide que hasta que llegue una restauración o una ubicación definitiva, se garantice su integridad. «Todo, menos mantenerla abandonada y dejar que el paso del tiempo la deteriore definitivamente. Por falta de argumentos a favor no será».

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