El domingo por la tarde saltaron todas las alarmas en Bugarra al confirmar que seis vecinos dieron positivo en la prueba PCR de covid-19. Eso se traduce en que medio centenar de vecinos y vecinas están también en cuarentena en un municipio cuya población es de alto riesgo.

La alcaldesa, María Teresa Cervera, aseguró a este diario que las autoridades sanitarias están ya trabajando en el brote y contactando con todas las personas que se relacionaron con los positivos. Entre ayer y hoy se realizarán todas las pruebas en el centro de salud de Pedralba, donde radica la atención sanitaria de Bugarra y Gestalgar, pueblos vecinos que han visto cómo sus centros auxiliares han sido cerrados por «falta de personal», lo que evidencia la carencia de medios sanitarios en La Serranía.

La primera munícipe no se aventuró a confirmar una cifra de personas que están en cuarentena en estos momentos, pero fuentes de la localidad aseguraron a este diario que podrían ser más de medio centenar. Los contagios se produjeron en el seno de una familia y varios amigos.

El ayuntamiento emitió el domingo un comunicado donde confirmaba «varios casos positivos» y como medida de prevención cerraba las instalaciones municipales deportivas, prohibía la actividad física, se clausuraban los parques infantiles y se suspendía el mercado municipal, además de desinfectar las calles. Tranquilizaban a la población asegurando que los rastreadores se pondrían en contacto con las personas cercanas a los positivos y, en caso de ser sospechoso, debían ponerse en contacto con el médico de atención primaria o con el número de teléfono que la Generalitat facilita para consultas sobre coronavirus.

Sin embargo, el ayuntamiento emitió ayer un bando municipal en el que anunciaba que las consultas auxiliares de Bugarra y de Gestalgar, ambas dependientes de Pedralba, cerraban por falta de personal. Eso obliga a desplazarse a Pedralba a cualquier vecino para cualquier necesidad sanitaria, en este caso, sospechas de haberse contagiado de covid-19. Para ese caso, se aconseja hacer aislamiento y «pedir cita previa con su médico», pese al colapso sanitario al que se exponen estas semanas los centros de salud.

En el caso del centro sanitario de Bugarra, solo hay una persona en centralita para atender a los tres pueblos, como recuerda el propio bando. En caso de ser un contacto estrecho con el contagiado, el aislamiento es obligatorio y serán las autoridades sanitarias las que se pondrán en contacto con las personas que hayan tenido un contacto directo con los contagiados.