Entre hoy y mañana, Bugarra sabrá el alcance que la covid-19 va a tener en su municipio. Tras el brote detectado este fin de semana donde seis personas -sin un contacto estrecho - dieron positivo en coronavirus, ayer más de 50 personas, vecinas y vecinos de la localidad se sometieron a la prueba PCR para confirmar o descartar el contagio. El centro de salud de Pedralba cortó dos calles para dar cabida al incesante goteo de personas que se desplazaron a hacerse la prueba por haber tenido un contacto más o menos estrecho con los ya contagiados. Por ello, los sanitarios prepararon una carpa para realizar pruebas con el sistema «autocovid». Así, se habilita una calle para que los pacientes se hagan la prueba desde el coche, sin necesidad de bajar, y firmen un documento -con su propio bolígrafo traído de casa- comprometiéndose a hacer cuarentena y estar confinados hasta el resultado de la prueba. Esta acción llega en un momento crítico para la atención sanitaria de la zona, ya que Salud Pública, dependiente de la Conselleria de Sanidad, ha ordenado cerrar los consultorios auxiliares de Bugarra y Gestalgar, por lo que los pacientes de ambos pueblos se desplazarán ahora -o llamarán por teléfono- al ambulatorio de Pedralba, con una sola persona en la centralita. De hecho, ayer se colapsó el número de teléfono de atención a los pacientes porque la gente estaba «somatizando» los síntomas de la covid-19, según apuntó la alcaldesa de Bugarra, Teresa Cervera. Según dijo, se ha enviado una carta a Salud Pública para pedir que se reabra el consultorio por la delicada salud de su población y las pocas alternativas que tienen para poder desplazarse a Pedralba, ya que muchos no conducen ya. La primera edil aseguró que la gente está tensa.

Se trata de un municipio de cerca de 650 residentes y quien más o quien menos ha tenido relación con algún contagiado. A eso se suma que el 70 % de su vecindario tiene más de 65 años, lo que les hace ser personas de riesgo frente al virus. «En València pasaría desapercibido, pero un brote así, en Bugarra, es muy impactante», explica Cervera. Entre hoy y mañana se sabrá la incidencia del virus en el municipio, cuando estén los resultados de las PCR. Cervera no descarta que pudieran ser confinados a tenor de lo ocurrido en localidades como Benigànim. «El temor está ahí, no depende de nosotros, sino de Salud Pública», señala la alcaldesa. «Si la curva va subiendo y para pararla hay que confinarse, así será», concluyó.