Dos meses largos de incendio (y de humo) y lo que queda. Además, las llamas han sacado a la luz los problemas de la planta de transferencias de restos de jardinería y podas de Ramblars de Xàbia. No cuenta con medidas de prevención de incendios (hay dos hidrantes y no funcionan) y ahora vuelven a acumularse a pocos metros de las llamas residuos verdes. La máquina que los tritura está averiada. Ecologistes en Acció de la Marina Alta denuncia, además, que la planta, que antes fue vertedero, carece de licencia. Y avisa de que el humo se ha convertido en «un problema sanitario y de salud pública».

Los ecologistas han presentado escritos en el decanato de los juzgados de Dénia y ante el Seprona para exigir que se clausure de forma urgente y provisional esta planta. Advierten de que pueden saltar pavesas y prender en las montañas de restos verdes y crear un nuevo foco de incendio. En Ramblars, también hay grandes montones de enseres domésticos (residuos básicamente de madera).

Ecologistes en Acció advierte de que el humo forma una neblina que se esparce por Xàbia y Gata.