La Sociedad Valenciana Protectora de Animales y Plantas (SVPAP) se encuentra en una situación "desesperante", tal y como explicó una portavoz de la entidad a Levante-EMV. Y es que la situación económica que "asfixia" al servicio de recogida y refugio de animales ha provocado la falta de provisiones para alimentarlos. Desde hace algunos días y "debido al impago del ayuntamiento", no tienen pienso para dar de comer a los cerca de 800 gatos y perros que habitan en las distintas instalaciones de la protectora.

"Los proveedores no quieren ni oír hablar de nosotros", explican las mismas fuentes. Hace tiempo que dejaron de fiar pienso a la protectora, que no puede hacer frente a las facturas. "Con los veterinarios estamos igual. Todos los días entran animales con necesidad de alguna operación, todos los días, pero los veterinarios no quieren continuar operando gratis, porque saben que el ayuntamiento no va a pagar", lamentan desde la institución.

La acción de los voluntarios es la que está haciendo que durante estos días salgan del paso, pero no es suficiente. Pronto, aseguran, los trabajadores de la protectora, que llevan desde febrero sin cobrar, deberán comenzar a ver cómo los animales pasan hambre. "Es horrible escucharles aullar de hambre".

La situación empeora en verano. Decenas de perros y gatos son abandonados todos los días por sus dueños porque no forman parte de su equipaje estival. La protectora, de hecho, tiene un cartel hace meses en la puerta en el que se puede leer que ningún animal más será recogido aunque lo dejen en la puerta. "No cabe ni uno más, y aún así nos dejan todos los días cachorros y otros animales en la entrada. La policía también nos trae todos los días, algunos en estado muy grave, por lo que requieren operaciones y cuidados especiales que no les podemos facilitar en este momento", sentencian las mismas fuentes.

Vacunas, operaciones y otros cuidados básicos como la desparasitación de los recién llegados son indispensables en una protectora de animales, pero todos esos servicios hace meses que se han visto afectados por la falta de liquidez.

"Hemos hecho concentraciones, hemos pedido mil veces al ayuntamiento que nos escuche, pero ya ni nos cogen el teléfono", explican desde la protectora. " Ya no sabemos qué hacer, es desesperante".

Por su parte, la concejala de Medio Ambiente, Lourdes Bernal, ha insistido en varias ocasiones en que el consistorio no va a reabrir la cámara de gas para sacrificar a estos animales con un destino incierto porque, de hecho, lleva dos años estropeada y aún no la han arreglado. Esta teoría la sostuvo ña protectora hace unos meses, debido a la avalancha de animales en los refugios y la poca capacidad de acogida que tenían y siguen teniendo.

"La protectora debería reaccionar"

Por otra parte, un grupo de exsocios y usuarios de la protectora han criticado la "mala gestión" de la entidad, que "despilfarró cuando tenía dinero y ahora se queja de que no tienen, de manera que acaban siendo los animales los que sufren las consecuencias". La SVPAP cuenta con un millón de euros de presupuesto y fue criticada por destinar 600.000 euros a la partida de sueldos. "La protectora debería reaccionar", explican las mismas fuentes. "Si no tienen liquidez que se planten, que hagan algo, pero que no dejen ni un animal más sin recoger o enfermo en la calle", lamentaron. "Valencia no se puede quedar sin recoger animales el mes de agosto, el peor de todos. Es inaceptable", añadieron.