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El gasto en prótesis para la sanidad: 133,2 millones al año y subiendo

Los hospitales valencianos cerraron 2018 con un 8,5 % más de implantes colocados - La prótesis más utilizada es la lente para las operaciones de cataratas - El coste total se ha disparado un 24,3 % en cinco años

El gasto en prótesis para la sanidad: 133,2 millones al año y subiendo

Lentillas dentro de los ojos para solucionar unas cataratas; un marcapasos para cuando el corazón deja de latir con ritmo; una nueva junta de acero para esa rodilla que se atasca... La lista de elementos externos que los cirujanos usan para «reparar» nuestro cuerpo cuando algo falla es larga y la factura para la sanidad por este concepto no deja de crecer.

Según la memoria de 2018 del Comité Económico y Social de la Comunitat Valenciana, que maneja datos de la Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios, el año pasado se destinaron 133.218.042 millones de euros para costear los 118.871 implantes realizados en hospitales de la Comunitat Valenciana, un 10,2 % más de lo gastado en 2017. La diferencia es de un 24,3 % si se compara con hace cinco años atrás.

La explicación hay que buscarla tanto en los avances tecnológicos, que aportan nuevas soluciones para problemas que antes no se podían resolver, como en el envejecimiento de la población: ahora se vive más y hay más población añosa en la C. Valenciana, lo que supone más problemas de salud y mayor necesidad de esos reemplazos artificiales para aquellas «piezas» que ya no nos funcionan.

De las más de 118.000 prótesis implantadas el año pasado, casi la mitad lo fue por la especialidad de Oftalmología. Son estos profesionales los que manejan la prótesis «estrella» de toda la sanidad: las lentes intraoculares que se colocan para sustituir el cristalino del ojo en las operaciones de cataratas.

Es la intervención más común entre los oftalmólogos y, de hecho, es la más habitual de todas las que se hacen en la sanidad. «Es la operación por excelencia», reconoce Juan Navarro, jefe del servicio de Oftalmología del Hospital de Gandía y presidente de la Sociedad Oftalmológica de la C. Valenciana. «Solo en mi hospital haremos del orden de 2.000 al año. Si hace una veintena de años operábamos dos veces a la semana de cataratas, ahora hacemos 10 sesiones a la semana, mañana y tarde, y aún así no se logra rebajar la lista de espera», recuerda Navarro. Además de ser la más habitual, la de cataratas es la operación que más gente suma todos los años. De hecho, una de cada cinco personas en lista de espera en la sanidad pública (13.170 de las 66.659 totales a finales de junio de este año) está ahí para operarse de cataratas y que le cambien el cristalino por una lentilla artificial.

Las que más gastan

Son los que más prótesis ponen pero, pero la Oftalmología tiene poco que ver con que el gasto en estos productos sanitarios se dispare. «La ponemos mucho, pero realmente cada lente está entre los 100 o 120 euros», detalla Navarro. En total, la especialidad pone la mitad de todas las prótesis que se usan al año, pero solo es responsable del 5,7 % del gasto anual. El aumento de la factura llega por otro lado: las prótesis que se colocan tanto en cirugía cardiaca y vascular como en traumatología.

«La prótesis que más utilizamos los cardiólogos con diferencia son los stents», explica Francisco Ten, adjunto en el servicio de Hemodinámica del Hospital La Fe. Son pequeñas piezas de acero que se insertan en las arterias y las dilatan para recuperar el flujo de sangre al corazón y evitar una angina de pecho o un infarto. Solo en La Fe, este servicio implanta unos 1.500 stents al año, a razón de unos 800 euros la unidad.

La prótesis que salva la vida de muchos infartados no es, sin embargo, la más cara de la especialidad. En el siguiente escalón estarían las válvulas aórticas que pueden rondar los 3.000 euros. «De la docena de intervenciones que tenemos a la semana, 4 o 5 son para colocar estas prótesis», explica el jefe de sección de Cirugía Cardiaca del mismo hospital, Salvador Torregrosa. Los avances médicos están haciendo posible, ahora, que estas válvulas se implanten sin cirugía mayor, accediendo a través de la femoral, la técnica TAVI. Como recién llegada, estas prótesis son también más caras: entre 15.000 y 20.000 euros. «Aquí ponemos las mismas que le pusieron hace poco al cantante de los Rolling Stones, Mick Jagger», explica Ten.

En Cirugía Cardiaca de La Fe es también donde se coloca la prótesis más cara de todas: el conocido como corazón mecánico que llega a los 90.000 euros, pero que solo se ha implantado en diez ocasiones desde 2013, uno el año pasado.

Por detrás de los cardiólogos y los cirujanos vasculares, los que más gastan en implantes son los traumatólogos con su propia intervención estrella: la prótesis de rodilla. «Es realmente la que más hacemos, junto con la de cadera, y están entorno a los 3.000 euros cada una. Muy por detrás en cantidad están las de otras articulaciones, como hombro o las fijaciones vertebrales que tienen un coste de unos 5.000 euros», explica el jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Doctor Peset, José Luis Rodrigo. Aquí también, la introducción de la última tecnología hace que el coste de algunas prótesis se dispare. Para algún caso muy difícil se ha encargado incluso prótesis personalizadas imprimidas en titanio con tecnología 3D.

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