La última decisión de la Conselleria de Sanidad de mantener abiertos este verano los centros de salud por la tarde para facilitar la atención sanitaria durante la «nueva normalidad» ha levantado ampollas entre los profesionales de Atención Primaria. La iniciativa no es oficial, pero ya se ha encontrado con el no rotundo de los profesionales que, directamente, ven imposible de poner en marcha por lo corto de las plantillas y las dificultades que ya hay de encontrar refuerzos en Medicina de Familia.
«No sé a quién se le ha ocurrido pero es imposible abrir hasta las 20 horas con dos tercios de la plantilla y sin refuerzos. El cabreo que existe en todos los centros es enorme», resumió ayer Andrés Cánovas, secretario de CESM-CV. El sindicato médico, junto al resto de entidades de la mesa sectorial de Sanidad (CC OO, UGT, Satse, CSIF e Intersindical), firmaban de hecho ayer un documento para pedir una reunión urgente a Sanidad para trasladarle su «hartazgo» por la falta de planificación durante la pandemia -está pendiente aún el plan de desescalada y el de vacaciones- y la toma de medidas «de forma unilateral» como ésta de los centros de salud.
Tal como publicó ayer Levante-EMV, Sanidad ha empezado a notificar a varias áreas de salud que los ambulatorios se mantendrán abiertos en julio, agosto y septiembre también por la tarde en contra del horario que venían adoptando para permitir las vacaciones de la plantilla. Hasta las 8 de la tarde debía haber al menos un médico, una enfermera y un celador en los ambulatorios. En la comunicación se pide que se cuantifiquen los refuerzos que serían necesarios. Desde Sanidad justificaron que todo está pendiente aún del plan de vacaciones que debe concretar qué centros y consultorios abren.
«No hay médicos»
«La medida es imposible de llevar a cabo si no se acompaña de más plantilla pero, por la falta de planificación va a ser prácticamente imposible encontrar profesionales disponibles... No hay médicos y al final habrá plantillas cortas y sobrecarga de trabajo», avanzó la secretaria general de la Federación de Sanidad de Comisiones Obreras, Rosa Atiénzar. Y es que, según los sindicatos, aunque la medida venga acompañada de más dinero y más plazas, la administración ya está teniendo serios problemas para cubrir los puestos ya creados y los refuerzos aprobados para la pandemia y el rastreo de nuevos contagios.
«Se les va a pedir que cubran el cupo de otros compañeros porque no hay suficientes profesionales para cubrir el plan de vacaciones. El personal se va a agotar más de lo que está y luego, si hay un rebrote en otoño, ¿qué va a pasar?», se preguntaba Rafael Cantó, de CSIF, que rechazaba sin embargo medidas de presión que ayer se plantearon en algunos foros como movilizaciones o ir a la huelga a la Primaria. Desde CESM sí apoyaban, por su parte, las dimisiones de coordinadores de centros de salud «que ya se han notificado», según Cánovas.
La medida también ha puesto en pie de guerra a las sociedades científicas de la Atención Primaria. Desde la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria ( Svmfyc), su presidenta Mª. Ángeles Medina insistía en que la medida era «inviable. Estamos exhaustos y no hay de dónde sacar refuerzos», y pedía tomar medidas como el plan que se puso en marcha en los hospitales para pagar aparte las horas que se hagan por la tarde. «Al estilo de un plan de choque. Que se paguen también peonadas en la Primaria», apuntó.
La apertura de los centros de salud se convierte así en un nuevo frente entre sindicatos y administración a propósito de la pandemia que se suma a las denuncias judiciales que ya han presentado formaciones como el sindicato médico y CSIF por la falta de material de protección.
Denuncia por falta de equipos
Por otra parte, los juzgados de Alicante han cedido a los de Valencia la competencia sobre la denuncia que la Plataforma valenciana de Afectados por el Coronavirus Covid 19 presentó contra los responsables de la Conselleria de Sanidad y directivos del Hospital General de Alicante por no proteger con equipos y otras medidas a los trabajadores sanitarios durante la crisis. El Juzgado 6 de Alicante se ha inhibido en favor de otro juzgado, el 12 de Valencia, que ya instruye una causa por hechos similares y que podría afectar a las mismas personas en buena medida aunque la denuncia se centra en Alicante.
