La pandemia del coronavirus en la Comunitat Valenciana ha subido una marcha durante octubre, un mes que se cierra con 22.338 contagios de covid, un aumento de más de 6.000 casos respecto a septiembre y el doble que agosto y que confirma que la autonomía, ahora sí, afronta la segunda ola. El ritmo de su llegada, sin embargo, no ha sido constante, sino que se detecta un fuerte repunte a partir de la segunda quincena, coincidiendo con los días posteriores a los festivos del 9 d’Octubre y del día de la Hispanidad y el aumento de las reuniones sociales y de la movilidad durante ese puente.
De hecho, en los primeros quince días de octubre la Conselleria de Sanidad reportó 6.932 contagios de coronavirus y en los segundos, 16.180. Lo mismo sucede con las hospitalizaciones y los ingresos en UCI: el 15 de octubre había 565 personas en los hospitales valencianos y 82 en cuidados intensivos. Este pasado viernes, 15 días más tarde y última cifra oficial disponible, los datos ya se habían duplicado, con 1.149 personas hospitalizadas y 172 en unidades de cuidados intensivos.
Los casos activos —el número de personas que está combatiendo el virus en la actualidad— muestran la misma evolución exponencial, al dispararse desde los 5.498 de mitad de mes a los 11.853 actuales. El incremento es casi idéntico atendiendo a los fallecimientos. En todo el mes han perdido la vida por la covid en la Comunitat Valenciana 173 personas, 118 en la segunda quincena.
Con todo, la incidencia acumulada a 14 días ha ido creciendo acorde a estos indicadores. La Comunitat Valenciana arrancaba el mes con 103 casos por cada 100.000 habitantes y lo cierra con esa tasa en 231. Sigue siendo la autonomía peninsular con mejor ratio, solo superada en España por las islas Canarias y Baleares, favorecidas por ese efecto insular. La incidencia de la autonomía es menos de la mitad que la tasa media nacional, que ha escalado este mes hasta los 485 casos por 100.000 habitantes.
La relación directa entre el aumento de las reuniones sociales y de la movilidad por los festivos y el acelerón de la pandemia ha quedado evidenciado durante los últimos días con la cascada de restricciones que han ido imponiendo las comunidades autónomas, ahora autoridades competentes de la gestión de la pandemia durante este segundo estado de alarma en España.
Toques de queda, cierres perimetrales e incluso clausura de la hostelería en Cataluña. ¿Su objetivo? Evitar que este nuevo puente por el día de Todos los Santos —que solo tiene lugar en Andalucía, Aragón, Asturias, Castilla y León, Extremadura y Madrid, que trasladan a hoy el festivo—, replique los efectos del anterior.
El 71 % de los brotes de coronavirus son sociales
«Todo cambió tras el puente», concluye Salvador Peiró, investigador en Fisabio, que secunda la tesis de que el aumento de las reuniones y de la movilidad favoreció la expansión del virus. Los datos de los brotes también lo refrendan. En octubre se han detectado más y de mayor envergadura. En total, han sido 865 los focos hallados en la Comunitat Valenciana, que han dejado 4.474 contagios, frente a los 640 focos de septiembre y 3.066 casos.
Lo que no ha variado es la tipología mayoritaria, que sigue siendo la social. Más de siete de cada diez brotes en octubre provienen de este ámbito (617), mientras 178 están ligados a entornos laborales y 70 a educativos.
Este pasado viernes se batió el récord de brotes registrados en 24 horas, con 88 focos que provocaron 467 contagios. Los expertos insisten en que es positivo que se detecten brotes y que lo preocupante sería lo contrario. El ejemplo recurrente es Madrid. La comunidad que gobierna Isabel Díaz Ayuso ha reportado desde julio 449 focos, prácticamente la mitad de los hallados en la Comunitat Valenciana solo este octubre. En total, ya son 1.909 los episodios de este tipo encontrados desde que se levantó el primer estado de alarma en la Comunitat Valenciana, que han implicado a 9.853 personas.
Más casos de covid pero menos PCR
La lógica indicaría que esta avalancha de casos, ingresos y fallecimientos ha ido aparejada a un fuerte aumento de las pruebas PCR debido a la existencia de más personas contagiadas y una mayor necesidad de rastreo de esos positivos. Pero no ha sido así. De hecho, en octubre se han practicado 4.025 test de este tipo menos que en septiembre (277.528 frente a 273.503), pese a los 6.000 casos más detectados este mes que el anterior. Entre agosto y septiembre, con un aumento mensual de 4.500 infecciones de uno a otro, las PCR sí incrementaron en 51.146.
Como consecuencia, la tasa de positividad en este tipo pruebas —las más fiables para la detección de la enfermedad y con diferencia las más empleadas por la Generalitat— ha subido más de dos puntos porcentuales entre septiembre y octubre, pasando del 5,8 % al 8,1 % según los datos aportados a diario por la conselleria y recopilados por este diario.
Peiró atribuye esta bajada en la ejecución de test en un contexto de aumento de los contagios al colapso de los laboratorios que analizan las muestras, lo que podría estar dilatando el proceso.
Otra consecuencia posiblemente asociada a esta reducción de pruebas es el aumento del porcentaje de personas con síntomas en un 5 %, del 62 al 67 % este mes. Es decir, se detectan menos asintomáticos, una de las claves para atajar precozmente la transmisión y uno de los pilares de la estrategia valenciana ante la pandemia, lo que denota un agotamiento del sistema de rastreo.
