El 1 de enero de 2021 será ya una fecha inolvidable para Mª Ángeles Roca García y toda su familia. Como ella misma reconoce, el año lo empezaron «de la mejor manera posible», pues apenas pasados 15 minutos de las campanadas, dio a luz a una preciosa niña de 4 kilos de peso en el Hospital de Sagunt, Amaia, que luego ha acabado siendo el primer bebé del año en la Comunitat Valenciana. Además, aún sin salir del paritorio, Mª Ángeles pudo presentársela a sus otros dos hijos mediante una videoconferencia, a través de un teléfono móvil.

«Es increíble. No se puede pedir más. Mi hija ha nacido sana; el parto ha sido superbonito, con mucho cariño, muy humano y muy personal; me han tratado y me están tratando como a una reina, con detalles como ponerme un espejo para ver cómo salía su cabeza o grabarme un trocito del parto. En realidad, empecé el año dando a luz y ¡pudiendo presentar a mis hijos a su hermanita a través de una videoconferencia en el mismo paritorio! Encima, hoy es mi 40 cumpleaños, decía entusiasmada a Levante-EMV, destacando el apoyo de su pareja, Rafa López Genís, y sus pequeños, Luis y Asier, de 7 y 5 años.

Aunque la normativa anticovid le obligaba a llevar mascarilla en el parto, Mª Ángeles asegura que al final fue menos molesto de lo que esperaba. «Era de las que pensaba que sería un problema, pero me puse una quirúrgica y superbien», explicaba por teléfono ya que, debido a la pandemia, solo se permite un acompañante.

El padre de Amaia tampoco podía ocultar su alegría en un momento tan especial. «Estamos superemocionados. Ha sido un parto natural muy bonito», decía tras destacar la profesionalidad de todo el equipo y, en especial, de la matrona Lola Serrano. «Es la mejor», apuntaba, confesando que, aunque les corresponde otro hospital, tramitaron todo para que Mª Ángeles pudiera parir en el centro donde trabaja Lola Serrano.

Regalo del hospital

Tras una Nochevieja que esperaban pasar en casa, pero que vivieron en el hospital desde las 21 horas tras empezar a dilatar, Mª Angeles irradiaba felicidad. «Mis suegros tuvieron que venir corriendo a por mis hijos pero todo ha ido muy bien. Ojalá este 2021, con la vacuna y todo, siga así», decía, además de agradecer la canastilla regalada por el hospital al primer bebé del año y esperar que su hija ame tanto el rugby como el resto de la familia, pues, como su padre y sus hermanos lo practican, ayer mismo ya la dieron de alta en la federación.