La renovación de las portavocías de Iniciativa del Poble Valencià que se produjo ayer y que proclamó la candidatura de Aitana Mas y Alberto Ibáñez como nuevas caras visibles del partido han traído de vuelta el debate sobre la confluencia o no en las elecciones autonómicas del próximo año. Fue a cuenta de la intervención del vicepresidente tercero, de Unides Podem, Héctor Illueca, quien lanzó sin rodeos el ofrecimiento de confluir electoralmente, porque "estamos llamados a recorrer de la mano el camino hacia el horizonte" que ambos partidos "contemplan y comparten".
Iniciativa recoge ese guante. Lo hacen los nuevos portavoces, pero la idea siempre ha sido bien vista por los líderes del partido, como Mónica Oltra. Mas asegurado que las declaraciones de ayer de Illueca son la primera vez que Unides Podem ofrece abiertamente a confluir. Además, lo hizo en el día en que este partido renovaba sus cargos, como una declaración de intenciones para negociar con la nueva cúpula. De hecho, será uno de los primeros asuntos a tratar en la reconfiguración de este partido que comenzó ayer.
Unides Podem ofreció confluir a Iniciativa en el día en que este partido renovaba sus cargos, como una declaración de intenciones para negociar con la nueva cúpula
El debate todavía está por hacer, si bien Mes-Compromís ya celebró su congreso, Iniciativa también y Verds lo hará en mayo. Es decir, los tres partidos de Compromís están en forma para encarar esta cuestión donde hay posturas encontradas dentro de los propios partidos.
Pese a que Compromís tiene una marca plenamente consolidada en las Corts y en el tablero político valenciano, son conscientes de que la suma de diputados de Compromís y Unides Podem les daría un peso importante frente a los actuales socios del PSPV: si se mantuvieran los actuales resultados, a los 17 diputados de Compromís se sumarían otros 8 de Unides Podem, con lo que les acercaría a los 27 que ahora tienen los socialistas, un peso suficiente como para asegurar un nuevo Botànic y la única opción de que Oltra llegara a la presidencia. Lo dejó caer Illueca también en su intervención: la correlación de fuerzas más allá de la izquierda del PSPV, deben unirse para ganarles terreno, una premisa que el actual vicepresidente ha defendido siempre y que ayer no perdió la oportunidad de hablarlo claramente con las bases de un futuro aliado.
Debate interno
Sin embargo, el beneplácito que en Iniciativa se le da a esta posible confluencia con los morados tendrá que comulgar con el resto de organizaciones que componen Compromís, como Més, el antiguo Bloc, que es mucho más reticente a las alianzas electorales. Sobre todo, por la "pérdida de identidad" que eso puede suponer. También su lideresa, Águeda Micó, fue contundente el sábado al afirmar que solo pactarían con fuerzas "que obedecieran al pueblo valenciano", dejando fuera cualquier posible relación electoral con un partido de alcance estatal como es Unidas Podemos.
Esa negativa sería más grave si se mantuviera para las elecciones estatales. En Més argumentan que se corre el riesgo de perder la identidad, como ayer advirtió Micó y como ya sucedió en la primera experiencia con Podemos, con Pablo Iglesias al frente, en 2015. No fue así en 2019, cuando después de varios meses de contactos, Compromís decidió inclinar la balanza hacia Íñigo Errejón con el recién estrenado proyecto de Más País donde la experiencia ha sido más satisfactoria. Aitana Mas asegura que de todo ello se ha aprendido y la oportunidad de unirse a la plataforma de Yolanda Díaz no es una mala opción, si bien hay que conocer primero la letra pequeña de este proyecto, debatirlo en el seno de Iniciativa y después en el de Compromís.
Lo que a uno y a otro lado tienen claro es que queda tiempo por delante. A algo más de un año, en Unidas Podemos confían en que impere "un cierto sentido de la responsabilidad", conscientes de que en ciertos sectores de Compromís esta idea sí encaja con las pretensiones del partido valencianista.
