El episodio de calima que está afectando a la Comunitat Valenciana puede tener consecuencias para la salud. Estas pequeñas micropartículas de polvo en suspensión que durante esta semana han hecho que el cielo sobre Valencia se vuelva de color anaranjado supone un gran reto para quienes tienen problemas respiratorios. La calidad del aire empeora drásticamente si la acumulación de estas partículas aumenta y supera los niveles apropiados.
Quienes más expuestos están a situaciones graves son aquellas personas que ya tienen patologías previas respiratorias. Se trata de pacientes con asma, problema respiratorios, insuficiencia pulmonar o enfermedad obstructiva pulmonar crónica. En estos casos, la presencia de grandes concentración de polvo del desierto en suspensión puede desencadenar algunos episodios de insuficiencia respiratoria.
Para el resto de población, la acumulación de estas partículas que vuelven de color amarillo y naranja el cielo provoca sequedad en las mucosas, tos o irritación ocular. Los expertos recomiendan salir a la calle con mascarillas protectoras, hidratarse la garganta y utilizar colirio para rehidratar los ojos.
Este mapa interactivo permite conocer el estado del aire y su calidad en la Comunitat Valenciana.
¿Qué es la calima y por qué vuelve naranja el cielo?
Se trata de millones de micropartículas de polvo sahariano en suspensión en la atmósfera que el viento ha arrastrado procedente del Sáhara. Este polvo en suspensión refleja la luz del sol y genera ese color amarillo anaranjado que dejó imágenes que bien podrían ser de otro mundo, de Marte. La acción del viento y la tenue lluvia ayuda a limpiar la atmósfera de estas partículas, que han acabado mezcladas con el agua en forma de barro. Se trata de un fenómeno conocido como "lluvia de sangre" o de barro y se espera que a medida que avance la semana se registren más episodios de lluvia mezclada con el polvo en suspensión.
