El director de Antifraude denuncia presiones a la agencia por sus periciales y "expedientes"

El director de la Agencia valenciana antifraude, Joan Llinares, denunció ayer presiones a la entidad que dirige por las periciales que ha presentado relacionadas con el caso Azud y "expedientes que afectan a algún que otro sindicato", aseguró. Llinares compareció para explicar en la comisión de Hacienda los dos presuntos casos de acoso denunciados en una encuesta del plan de igualdad de la agencia, que no se han constatado, así como los dos expedientes abiertos a dos trabajadoras por filtrar el contenido de la encuesta del Plan de Igualdad, que era confidencial.

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Llinares detalló las investigaciones realizadas por la Agencia Antifraude y denunció una campaña de acoso para "desprestigiar a la agencia y las personas que trabajan en ella". El director de Antifraude se preguntó: "¿Por qué pasa todo esto? Todo lo que sale, la insistencia. ¿Por qué? Nos lo hemos preguntado a partir de todas las informaciones publicadas". Y el director de Antifraude lo ha relacionado con el hecho de que "el abogado de las [dos trabajadoras] expedientadas es el mismo abogado de Jaime Febrer en el caso Azud", señaló en referencia a Manolo Mata, exsíndico del PSPV en las Corts, al que no ha llegado a mencionar en su intervención.

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También relacionó esta campaña de acoso a la Agencia Antifraude a "la visita de un responsable sindical para reclamar que este expediente lo tienes que archivar. Es un expediente con cosas sucias. Las personas expedientadas son de ese sindicato. Es una especulación posiblemente, pero sin unir unas cosas con las otras, no me lo explico".

Porque se trata, añadió, "del mismo sindicato que intentó acabar con la Agencia Antifraude cuando aún estaba yo solo en la entidad y presentó una cuestión de inconstitucionalidad de la agencia", explicó Llinares. Aunque no lo ha mencionado, el sindicato al que hacía referencia el director de la Agencia Antifraude es el de la UGT.

"La Agencia --añadió Llinares-- molesta. Su trabajo molesta, y en vez de aceptar las recomendaciones, deciden desprestigiar al personal para poder atacar los informes judiciales que hacemos" cuando van a ratificarlos ante los tribunales, lamentó.

Sobre los presuntos casos de acoso, Llinares explicó que no se ha logrado acreditar la existencia de ningún caso de acoso sexual en el seno de esta entidad. Aunque sí se han obtenido "pruebas" de que "dos trabajadoras sacaron información de la encuesta confidencial sobre el plan de igualdad interno en las que se preguntaba sobre situaciones de acoso, que acabó publicada en un medio de comunicación. Por este motivo, la Agencia Antifraude ha abierto contra ellas sendos expedientes disciplinarios, uno de los cuales ha derivado en suspensión de empleo y sueldo por seis meses, que ha sido anulado por el TSJCV, mientras se tramita una denuncia contra la agencia por presunta vulneración de los derechos fundamantales.

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