La sequía obliga a activar la situación de emergencia en la cuenca del Palancia

La zona del Sénia- Maestrat ya está en alerta

El pantano del Regajo, del sistema del Palancia. | LEVANTE-EMV

El pantano del Regajo, del sistema del Palancia. | LEVANTE-EMV / Ivan Checa. Castelló

Ivan Checa

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha declarado la situación de emergencia por escasez hídrica en el sistema del Palancia-Les Valls al agravarse aún más una situación que se arrastra desde hace meses, principalmente, por la ausencia de precipitaciones en toda la provincia.

El informe de seguimiento de la sequía correspondiente al mes de diciembre, publicado ahora, sitúa a dicha unidad territorial en el nivel más elevado de aviso ante una escasez coyuntural. Allí se incluyen diversos municipios castellonenses como el Toro, Viver, Jérica, Altura, Segorbe y Soneja, además de otros valencianos como Sagunt, Quartell, Faura o Gilet.

La declaración abre la puerta al organismo a aplicar de forma paulatina, lo que se deberá concretar próximamente tras la decisión de sus órganos colegiados, las diferentes medidas contempladas en el plan especial de sequía, que se actualizó este ejercicio pasado.

Posibles restricciones

Las acciones se centran principalmente en reforzar la concienciación, restringir el agua superficial suministrada para distintos usos como el agrícola, incrementar el control o movilizar suministros externos como cisternas.

A nivel particular, para el sistema del Palancia-Les Valls, la estrategia prevé en caso de emergencia incrementar el aprovechamiento de los recursos hídricos con las estaciones depuradoras o reducir las demandas ya consolidadas.

También preocupa el escenario de escasez que se vive en el entorno del Sénia-Maestrat, en la zona norte de Castellón. Esta demarcación queda situada en el nivel de alerta, a solo un paso de la declaración de emergencia, y comprende a poblaciones como Vinaròs, Benicarló, Peñíscola, Alcalà de Xivert, Torreblanca, Orpesa, Càlig, Xert, Catí o Albocàsser.

Las acciones previstas para aplicar aquí en la estrategia son más contenidas, si bien también contemplan destinar recursos extraordinarios o vigilar el uso correcto del agua, entre otras.

En la otra cara se sitúa la zona central de la provincia, la de la unidad territorial Millars-Plana de Castelló, cuyos valores de escasez hídrica se fijan por ahora lejos de la alarma al encontrarse dentro de la normalidad, como confirma el documento de la CHJ.

La confederación mantiene a cinco de los 13 sistemas que la conforman en el escenario de sequía prolongada, un indicador centrado en la afección a largo plazo del déficit de precipitaciones o los caudales.

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