Compromís se fija en el modelo Bildu para reestructurarse

Iniciativa pide a Més y Els Verds crear un grupo de trabajo para cambiar la fórmula de la coalición en 2024

Ejecutiva de Iniciativa celebrada el pasado martes donde propusieron una mesa de partidos.

Ejecutiva de Iniciativa celebrada el pasado martes donde propusieron una mesa de partidos. / Levante-EMV

Diego Aitor San José

Diego Aitor San José

Decía Tolstoi que todas las familias felices son iguales, pero que las infelices lo son cada una a su manera. Compromís es una caja de matrioskas de tres partidos —Més, Iniciativa y Els Verds— donde cada uno afronta a su manera la pérdida de gran parte del poder institucional de las últimas dos legislaturas, pero con el convencimiento de que algo han de cambiar para ser más uno que tres, aunque sin saber exactamente cómo dar en la tecla y con EHBildu como uno de los modelos organizativos a estudiar. 

El primer paso ha sido la creación de una «mesa de partidos» que aborde el asunto en los próximos meses, una idea que Més y Els Verds aceptan llevar adelante. La lanzó el martes la ejecutiva de Iniciativa, la pata ecosocialista que dirigió desde su fundación en 2008 hasta 2022 Mónica Oltra y el segundo partido en afiliación dentro de la coalición por detrás de Més, con quien las relaciones no pasan por su mejor momento. 

En parte para evitar estas tensiones —como fueron las primarias a las Corts o la designación del senador autonómico— y en parte para tratar de frenar su crisis interna —con las bajas de una veintena de cargos, algunos de la ejecutiva—, los de Aitana Mas y Alberto Ibáñez propusieron esa mesa de trabajo que, según detallaron fuentes de lniciativa, es un «grupo de trabajo» con uno o dos representantes de cada uno de los tres partidos para que diseñen la futura estructura de Compromís, su fórmula jurídica. 

Los modelos son múltiples porque la izquierda de la izquierda en el Estado español se caracteriza por la variedad señalada por Tolstoi. Incluso Sumar, a nivel estatal, aparecería como ejemplo de esa caja de muñecas rusas. Pero la más mencionada por los diferentes sectores de la coalición es el modelo de Bildu, que a efectos prácticos, supondría ser una federación de partidos. 

Primarias, coordinador y un voto

La formación vasca está integrada por tres partidos como son Sortu, Eusko Alkartasuna y Alternatiba, cada una con sus diferentes especificidades; la primera ligada más a la izquierda abertzale indeendentista; la segunda salida de una escisión del PNV y la tercera más vinculada al mundo anticapitalista y salida de IU. Pese a esa variedad de voces, se valora de los vascos que han conseguido dar una visión unificada con respeto a la pluralidad.

En el caso de Bildu, cada formación cuenta con un representante en cada órgano de dirección con un voto cada uno. También tienen un coordinador, algo que no hay en estos momentos en Compromís, que se decanta por coportavoces. Además, se garantizan una serie de puestos de salida pactados en dicha ejecutiva lo que evita dejarlo todo a la rigidez de las cuotas o la tensión de las primarias.  

Estos son algunos de los requisitos que señalan las fuentes consultadas por los partidos de Compromís. Además reclaman que haya órganos colegiados compartidos que agilicen la toma de decisiones, que eviten las imposiciones y que sean flexibles a la hora de dar las respuestas necesarias. Ahora, pese a que hay una ejecutiva compartida con representantes de las tres formaciones, cada acción ha de pasar por las direcciones de los tres partidos, algo que, paradójicamente, dificultará el cambio.