Denuncian el primer ataque de lobos a ganado en una granja valenciana

La incursión del depredador en una granja de Aras de los Olmos acaba con diez ovejas muertas y otras 400 que tuvieron que ser recuperadas tras huir de la explotación

Diez de las ovejas muertas por el ataque de lobos en Aras de los Olmos

Diez de las ovejas muertas por el ataque de lobos en Aras de los Olmos

Minerva Mínguez

Minerva Mínguez

El lobo ha llegado a territorio valenciano, como ya preveían los expertos hace un par de años. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha hecho público este miércoles su incursión en una granja de Aras de los Olmos y el ataque sufrido por el ganado. Según el sindicato agrario, hasta diez ovejas murieron bien por asfixia o por mordeduras. El resto del rebaño, más de 400 ejemplares, escaparon y tuvieron que ser recuperadas por familiares y trabajadores de la explotación.

Por debajo de la valla

Según Antonio Miguel Álvaro, miembro de la junta directiva de AVA-Asaja los depredadores entraron por la noche por debajo de la valla que rodea el recinto de unos 5.000 metros. La mayoría de ovejas que huyeron estaban preñadas, señala, por lo que prevén "problemas en el parto previsto para el mes de abril". Desde el sindicato agrario se incide en que desde que el Gobierno lo incluyera en 2021 dentro del listado de especies protegidas y prohibió su caza la expansión ha sido muy rápida.

Indemnizaciones

Ante la llegada del lobo a tierras valencianas, Miguel Álvaro avanza que solicitará "unas indemnizaciones justas, ya que afirma que el seguro no compensará las pérdidas sufridas y mucho menos estimadas en el parto, y/o facilidades pa

ra reducir la población de este depredador".

Imagen de un lobo.

Imagen de un lobo. / levante-emv

Despoblación y abandono de tierras

Dos son los factores que favorecen el retorno de este mamífero carnívoro a la Comunitat Valenciana: la despoblación de las zonas rurales y el abandono de las parcelas agrícolas que año tras año aumentan la masa forestal. Los expertos consultados por Levante-EMV en su día ya avanzaban que era cuestión de tiempo que acabara regresando a los montes valencianos. El «blindaje» de la especie por parte del Ministerio para la Transición Ecológica ya soliviantó entonces a ganaderos, agricultores y cazadores.