Levante-EMV, Valencia

Rita Barberá gobernaría de nuevo el Ayuntamiento de Valencia con mayoría absoluta si hoy se celebraran elecciones municipales. Eso sí, el desgaste tras dieciséis años al frente del consistorio han hecho mella en la alcaldesa y candidata popular. La mayoría absoluta se conserva, pero por un sólo concejal. Barberá lograría 17 de los 33 ediles en liza, es decir, la mitad mas uno. Perdería, por tanto, dos concejales respecto a los logrados en las elecciones pasadas que irían a parar a las bancadas del PSPV y Esquerra Unida, respectivamente. Estas son las principales conclusiones que arroja la encuesta elaborada por Grup Marest para Levante-EMV a partir de una muestra de mil entrevistas personales que fueron realizadas la semana del 28 de marzo al 5 de abril.

El sondeo constata una pérdida en intención de voto para los populares de casi siete puntos porcentuales respecto al resultado de 2003. Un 45,2% de los encuestados se muestra proclíve a votar al PP frente al 52% que lo hizo hace cuatro años, un descenso que se refleja en la pérdida de dos concejales. Por contra, crece el respaldo a los socialistas del cap i casal. El tirón electoral de la candidata socialista, Carmen Alborch, queda cuantificado en un aumento de tres puntos en la intención de voto (pasa del 31,3% al 34,4%), lo que se traduce en trece concejales, uno más de los que el PSPV cuenta en la actualidad. EU, por su parte, amortizaría con creces el ligero aumento en intención de voto (pasa de 7,4 a 7,6%) al adjudicarse un edil más y confomar así un grupo de tres personas.

La participacion sube punto y medio

Según el sondeo, la participación en las elecciones se situaría en un 70%, un punto y medio por encima de la registrada en 2003. En teoría, la reducción de la abstención beneficiaría a los partidos de izquierda.

Con todo, la encuesta de Grup Marest revela que el incremento en la intención de voto de los partidos de izquierda no es determinante en la fuga de votos en el PP. La formación anticatalanista Coalición Valenciana (CV), que se pre senta por primera vez estas elecciones, arrebata un 4,5% del voto conservador y se queda a las puertas de la barrera del 5% necesaria para conseguir representación municipal. La formación que lidera el derechista Juan García Sentandreu conseguiría mayor expectativa de voto que su competidor, Unión Valenciana. El partido regionalista vería congelados sus resultados respecto a 2003 al reunir tan sólo el 3,7%. La foto fija se traslada al Bloc, que se conformaría con el mismo porcentaje de voto que en 2003: un 2,7%.

El 10% de votos se pierden

El sondeo evidencia como sólo los pactos preelectorales evitarían que más del 10% de los votos (los que suman los de CV, UV y el Bloc) se perdieran. Cabe recordar que, a diferencia de lo ocurrido en el ámbito autonómico, EU y Bloc no irán juntos a las elecciones en Valencia. Con todo, el PSPV podría sumar parte de los votos del Bloc, ya que ambos partidos ultiman un acuerdo para integrar al candidato de la formación nacionalista, Joan Mansanet, en la listas socialistas.

Por otro lado, el elevado porcentaje de votos que logra CV daría la razón a quienes en el PP se oponían a llegar a un acuerdo electoral con UV. Ese pacto podría haber supuesto que los votos de los valencianistas descontentos fueran a recalar a CV. Así, las cosas cuando aún queda mes y medio para las elecciones, la encuesta contiene elementos inquietantes para el PP, cuya fuga de votos en Valencia, podría hacerles perder Gobierno de la Diputación de Valencia.

Eso sí, la mayoría de los valencianos; un 66,5%, se muestra convencido de que será el PP quien ganará las elecciones. También son mayoría (un 31,4%) los que preferien que Barberá gobierne con mayoría absoluta, aunque el pacto PSPV-Bloc-EU-Verds es preferido por un 27,7%.