han pasado ya varios meses desde el inicio de la actividad de la nueva corporación municipal y de la delegación por el alcalde de la competencia en materia de Turismo en una nueva concejala, en la que también delegó las de Cultura, Patrimonio y Memoria. Y hasta la fecha, de las pocas intervenciones públicas que se han podido escuchar de la ahora ejecutora de la actividad municipal turística de Xàtiva, en distintas entrevistas en medios de comunicación locales, se ha podido extraer, como denominador común „al margen de la reiterada manifestación sobre lo bonita que es Xàtiva„ la intención de poner a Xàtiva en el mapa como destino turístico nacional.

Pero descontando iniciativas puntuales, algunas de las que se vienen repitiendo año tras año y que no consiguen elevar el turismo en la ciudad a la categoría de política municipal prioritaria y coordinada, poco o nada se ha escuchado en boca de la nueva regidora sobre la hoja de ruta o la planificación para llevar a buen término su loable propósito. Evidentemente, y dado el enorme retraso en la revalorización y dinamización turística real que se arrastra, la tarea a realizar es enorme y los puntos sobre los que actuar, tanto desde la competencia turística municipal como respecto a otras políticas que afectan directa o indirectamente a esta actividad, muy numerosos.

Comienza a echarse ya en falta, otra legislatura más, la definición clara de las líneas maestras de la política turística de la ciudad en función del modelo turístico más adecuado a sus recursos y productos. Sigue pendiente la actualización de la estructuración de la oferta turística y la definición del producto, de un modo claro y coherente, revisando el plan estratégico o los distintos informes DAFO realizados sobre las posibilidades turísticas en la ciudad y olvidados hace muchos años en algún cajón. Y cada vez urge más, viendo además el camino recorrido, con éxito y de manera adecuada, por otros destinos similares o incluso con menores posibilidades, la elaboración de una propuesta de actuación, por fases, con fechas y acciones concretas a desarrollar, y sobre todo la intención y la voluntad de cumplirla.

Si realmente la propuesta es situar a la ciudad como un referente turístico se ha de convertir primero a Xàtiva en un auténtico destino turístico. Y en este contexto la competencia municipal en turismo ha de tener una amplia transversalidad „con un papel de involucrado liderazgo de la primera autoridad municipal„, así como una visión y perspectiva global, ya que afecta a muchos otros ámbitos como el tráfico, accesibilidad, transportes y la movilidad, el urbanismo, el patrimonio cultural „un aspecto destacado en ciudades cuya oferta es principalmente histórico-monumental„, el comercio, la seguridad, o la limpieza urbana entre otros.

Hace poco se continuaba insistiendo en glosar las cifras de visitantes del castillo sin abordar por qué la mayoría de ellos no baja a visitar el magnífico conjunto histórico de Xàtiva, por qué no se aloja, no compra o no se queda a comer o cenar en los establecimientos de perfil más turístico. Y al ver la larga cola de visitantes „que además se destacaba„ esperando poder acceder al castillo nadie se pregunta por la experiencia negativa del turista, tal vez pensando que se habría podido evitar la espera si hubiera podido adquirir la entrada por internet o previamente en la oficina de turismo. Igualmente, no contribuye, desde el punto de vista de situar a la ciudad en el mapa del turismo, la confusión que produce la organización institucional sólo de visitas configuradas y dirigidas a un público local, los habitantes de la ciudad, ya que son más propiamente visitas culturales que turísticas, sin apenas repercusión en el visitante foráneo con bastante dificultad para acceder a ellas, al agotarse rápidamente sus plazas.

La Semana Santa de Gandia acaba de ser declarada de interés turístico nacional. Es éste un ejemplo de actuación, con un equipo de trabajo que inició los trámites en 2016, que contribuye, sin duda, como hito relevante, a impulsar la proyección turístico-cultural del destino y reforzar, aún más, a un destino, en este caso Gandia, como referente turístico nacional. De eso se trata Xàtiva.