Después de seis ediciones, en las que llegó a ser sede del campeonato autonómico, el Cross Ciutat d'Ontinyent no se celebrará el año que viene. El motivo, apuntan desde la organización, es la apertura de un espacio para perros en una zona del circuito por donde discurren unos trescientos metros del trazado, una parte que consideraban «clave» en la carrera. Ante la certeza de que, con este hándicap, el circuito no reunía las condiciones que los organizadores querrían para la prueba, cuando la Federació d'Atletisme de la Comunitat Valenciana se puso en contacto con ellos para la elaboración del calendario de carreras del 2020 decidieron no presentarse.
La organización hizo pública el lunes esta decisión, en un escrito en el que también lamentaban que el consistorio no les hubiese informado de la habilitación del espacio para perros, a pesar de que a todas luces afectaba al recorrido del circuito. No fue hasta que comenzaron las obras cuando tuvieron conocimiento de las mismas. «Nos quejamos entonces ante el ayuntamiento, cuando vimos que estaban levantando una valla sin que supiéramos qué pasaba. Pero ya era tarde», explicó ayer Fran Molla, director del Cross Circuit d'Ontinyent. Según señaló, el consistorio sí les habían notificado la construcción de una pista polideportiva en el espacio en el que se ubicaba la salida de la carrera, frente al CEIP Maestro Carmelo Ripoll, «Este era un inconveniente salvable», explicó Molla, «pero por el parque de perros pasaba un trazado que no podía trasladarse a otra parte», añadió.
Con todo, tras recibir las protestas del Circuit, el consistorio concertó al día siguiente una reunión entre responsables municipales y los organizadores de la prueba, para ofrecerles unas alternativas que estos últimos consideraban «inviables», en palabras de Molla: «Proponían abrir puertas en el espacio de perros, pero se tendría que haber abierto todo el ancho del parque. Hubiéramos tenido que modificar el recorrido del circuito, con lo que hubiera perdido mucho». Ante estos condicionantes, prefirieron dar fin a la celebración del Cross, que se celebraba de forma ininterrumpida desde 2014.
El regidor de Esports, Óscar Borrell, transmitió ayer su perplejidad por esta decisión, y apuntó que en el consistorio esperaban que se adoptasen las modificaciones propuestas en el trazado.
