Los asaltos en viviendas de los diseminados se suceden en los municipios de la Costera, la Canal y la Vall d'Albaida. Si hace unos días este diario informaba de los robos que se habían registrado en Ontinyent y Chella, durante el pasado fin de semana se tiene constancia de que uno o varios grupos han operado en otras localidades como Canals, l'Olleria o en Bixquert (Xàtiva).
Los asaltantes procuran acceder a las viviendas cuando no hay nadie en su interior, pero no siempre se aseguran bien de la ausencia de moradores. Es lo que ocurrió el jueves en el diseminado de Canals, cuando un padre que acababa de acostar a su hijo menor de edad se percató de los ruidos producidos por los golpes que unos desconocidos estaban propinando con un pico en una ventana de su hogar hasta llegar a destrozarla, forzando la reja de protección, para acceder a su interior.
Por suerte, el poco sigilo con el que actuaron los cacos fue determinante para que tanto la familia que reside en la vivienda como los vecinos de otras propiedades colindantes advirtieran de lo que estaba pasando, alertados con anterioridad de que se estaban produciendo robos en otras zonas del municipio. Los asaltantes fueron sorprendidos in fraganti y, ante los gritos de auxilio de los propietarios, terminaron huyendo del lugar, sin llegar a ser capturados.
Los vecinos de la partida Estepar y Viñals del término municipal de Canals cifran en cuatro las viviendas asaltadas el pasado jueves, a partir de las 20 horas. La Policía Local del municipio, sin embargo, solo tiene constancia de dos denuncias: una de ellas relata como los intrusos sí que lograron entrar en el interior del inmueble y sustraer dinero y oro.
Patrullas vecinales
Hace dos años se creó un colectivo de residentes de este enclave del diseminado que está en permanente contacto con la Policía Local y la alcaldesa ante la alerta generada por los robos y que organiza patrullas de vigilancia. Piden "más seguridad y medios para poder controlar los robos". Ricardo Sanz, portavoz del grupo vecinal, denuncia que el modus operandi de los ladrones es esta vez más agresivo y apunta que en otro de los asaltos los ladrones envenenaron a dos perros de una caseta, que han muerto.
Desde la Policía Local subrayan que se han intensificado los controles conjuntos con la Guardia Civil en los accesos de la localidad y hacen hincapié en que en los últimos días se han identificado asaltos en diferentes municipios de los alrededores, coincidiendo con el habitual repunte de este tipo de delitos que se da cuando empieza a hacerse más pronto de noche. "No sabemos si son un mismo grupo o varios, pero van de chalé en chalé, están dos o tres horas en cada localidad y se van", apuntan fuentes policiales. "Se suelen mover en el horario de más movimiento de la gente, entre las 19.30 y las 22 horas, y entran cuando no hay nadie en casa: una vez en el interior lo revuelven todo, buscando joyas y dinero", señalan. Cazarlos en pleno acto es "muy difícil" porque "tienes que coincidir con ellos y es muy complicado", indican desde la Policía Local.
