El diseñador de Xàtiva que ilustra las fiestas de decenas de pueblos de España

Sergio Iborra ha ganado más de una veintena de concursos nacionales de carteles de festejos populares en lo que va de año 

Sergio Gómez

Sergio Gómez

Sergio Iborra está acostumbrado a llevar el nombre de Xàtiva por todos los rincones de España. Ya lo hizo cuando estaba al frente del proyecto de la premiada cerveza artesanal La Socarrada y lo sigue haciendo ahora que ha retomado la pasión por el arte y el diseño que había dejado aparcada durante años, centrado en otras facetas profesionales. Fue a finales de 2022 cuando este especialista en Publicidad y Relaciones Públicas sintió una fiebre creativa que le ha empujado a presentarse a decenas de concursos para ilustrar los carteles de las fiestas de los pueblos de toda la geografía estatal.

Desde entonces su palmarés de premios está creciendo a una velocidad de vértigo. Aunque ha perdido la cuenta del número exacto, solo en lo que va de 2023 Iborra lleva ganados al menos una veintena de certámenes nacionales, con un ritmo de trabajo de diez horas diarias. En los últimos meses prácticamente no ha habido semana en la que no se haya alzado con algún galardón. Aunque todos le hacen mucha ilusión -"que valoren tu trabajo es lo que más te puede satisfacer", asegura- hay tres que atesora con especial cariño: el que ganó en las fiestas de San Xoán Bautista de Carballo, el de los festejos de Mérida y el de los Moros i Cristians de Paterna, donde se presentó por primera vez y suelen competir algunos de los mejores ilustradores del momento.

Iborra compagina el cartelismo con su trabajo como responsable de internacionalización en la empresa del escultor fallero Manuel Rubio

Iborra, que dejó de lado La Socarrada, compagina ahora el cartelismo con su trabajo como responsable de internacionalización en la empresa del escultor fallero Manuel Rubio, que promueve proyectos de decoración en distintas partes el mundo. Con anterioridad, tuvo su propia agencia de publicidad en València y fue profesor de marketing en la ESIC Business School. El diseñador tampoco es nuevo en esto de ganar concursos -hasta en dos ocasiones creó la imagen al cartel de la Fira d'Agost de Xàtiva cuando lo elegía un jurado- pero reconoce que tenía ganas de "retomar la vertiente artística".

Pola de Siero, Don Benito, El Campello, Polanco, Sueca, Alagón, Aielo de Malferit, Calahorra... Son solo algunos de los municipios cuya imagen de sus fiestas lleva el sello de Iborra. A veces el evento anunciador es la Semana Santa, otras los festejos patronales y singulares de cada pueblo y, en ocasiones, los Moros i Cristians o las fallas. Hasta ha conseguido algún doblete. Y ha sido finalista en otras competiciones, con accésit en el concurso de carteles de la Semana Santa Marinera de Valènica, donde se presentan primeros espadas.

Entre los puntos más positivos de esta carrera de premios que ha iniciado, el diseñador destaca la oportunidad que le brinda de recorrerse España conociendo de primera mano las celebraciones típicas de cada localidad. Y así es como se sintió maravillado por el viaje a la Edad Media que hace Calahorra o por la costumbre de pintar huevos que tienen en Pola de Siero.

El diseñador investiga a conciencia los iconos y conceptos más representativos de cada festejo antes de crear el cartel

Antes de crear sus obras, de hecho, Iborra se sumerge en una labor de investigación para descubrir los iconos y conceptos más representativos de cada festejo, con tal de plasmar las ideas adecuadas sobre el cartel con un estilo muy característico que le ha abierto puertas. También traza un estudio previo sobre la tipología de las obras que han ganado con anterioridad, con una dinámica de trabajo "muy marcada". "El cartel no viene por inspiración divina: hay mucho de trabajo de investigación y requiere un montón de dedicación, de hacer y deshacer". Un diseño le puede llevar cinco horas, pero también enquistarse hasta tres días. "Cada obra es un mundo", remacha.

Cientos de concursos

Aunque él no tiene perfiles públicos en redes sociales, Iborra recalca que estos canales han facilitado mucho la búsqueda de certámenes y el envío de propuestas. "Lo afronto como un reto. Para ganar te tienes que presentar a muchos concursos -él asegura haber concurrido a más de 50 este año- y saber gestionar el no, porque cuando no ganas es una frustración y para mucha gente que se dedica al diseño es complicado no tirar la toalla", sostiene, haciendo hincapié también en la "inversión" que se necesita para competir.

El diseñador elogia el cartel de la Fira d'Agost de Xàtiva de este año, obra de Cesc Roca, como "de lo mejor que se ha hecho". A su juicio, en cualquier caso, los concursos para elegir la imagen de las fiestas son "más democráticos" y dan oportunidades a los profesionales para que expresen su trabajo. Que haya cientos de competiciones de carteles de fiestas en España, señala, significa que se respeta el diseño, que está en un buen momento de forma, y sobre todo en València.

El galardón más reciente que ha obtenido Sergio Iborra ha sido en el III Concurso de Carteles 'La serp de la venta' de Xeraco. Pero no será el último: el verano es la temporada alta de los carteles de fiestas y su trabajo ahora mismo es frenético.