MATISOS DISCORDANTS

¿Se quiere mejorar la Fira de Xàtiva?

El autor hace balance de la última edición del evento y plantea la necesidad de establecer un sistema de conteo de visitantes

Una imagen de la última Fira d'Agost.

Una imagen de la última Fira d'Agost. / Agustín Perales

Antonio Martín Llinares

Manifestaba el alcalde de Xàtiva en la clausura de la Fira d’agost que hay que apostar por su mejora y modernización. Casi al mismo tiempo, entre los balances oficiales de la presente edición, la nota de prensa oficial municipal incidía, otro año más, en el incremento en la recogida de residuos durante la celebración festiva respecto al año anterior, en un ambiguo porcentaje y número de toneladas diarias de basura recogidas para pretender demostrar una mayor afluencia de visitantes a la ciudad en estos días. ¿De verdad, no existe otra manera de registrar con certeza y garantía el número de visitantes a la Fira? Sí, sí es posible. Tan sólo hay que mirar, a pocos kilómetros, en la cercana Cocentaina, a la segunda feria más antigua de la Comunitat Valenciana —la primera es la de Xàtiva—.

La fira de Tots Sants (598.956 visitantes, desde el 28 de octubre al 1 de noviembre de 2022) cuenta con un sistema de conteo para conocer la afluencia de público asistente con una tecnología exclusiva patentada por una empresa de Muro de Alcoy que permite el rastreo de teléfonos móviles registrando parámetros comunes a todos ellos, sin necesidad de aplicaciones, wi-fi ni bluetooth. A través de un sistema de contadores instalados en puntos estratégicos del recorrido ferial ofrece datos de afluencia en tiempo real y permite analizar el comportamiento de los asistentes en las diferentes zonas del certamen, lo que resulta de gran utilidad para la organización, para detectar cualquier problema de afluencia en una zona y para mejorar la experiencia de los visitantes.

Ambiente en la última Fira de Xàtiva.

Ambiente en la última Fira de Xàtiva. / Agustín Perales

Mirando hacia atrás, al finalizar la edición del año 2002, la Fira de Tots Sants se encontraba en un momento de incertidumbre. Debido a la gran afluencia de visitantes, por su importancia desde el punto de vista tradicional, no se estudiaban posibilidades de mejorar una serie de aspectos, que analizados en profundidad, hacían de esta celebración un evento lleno de carencias y que no explotaba todas las posibilidades que podría conllevar para la población. A través de un diagnóstico profesional y un serio estudio con propuestas de actuaciones, con un horizonte puesto más allá de los políticamente cortoplacistas 4 años de una legislatura, hoy la Fira es un evento de éxito, declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional y Bien de Interés Cultural (BIC). En julio de 2023 han comenzado los preparativos para su 667 edición, que contará con 10 sectores comerciales, 76.858 metros cuadrados de exposición comercial respecto de los 139.000 metros cuadrados de todo el recinto ferial y existe una previsión de asistencia de 800 expositores, que se mantiene en las últimas ediciones.

Mientras, sobre la Fira de Xàtiva, cuya distancia con respecto a la fira contestana hace unas decenas de años no era tan abismal como la actual, se puede leer en distintas crónicas que el declive del recorrido comercial es una de sus asignaturas pendientes, con un recorrido comercial que ha perdido este año 23 paradas y se percibe más vacío.

Un proyecto a medio plazo

¿Mejorar y modernizar la Fira d’Agost de Xàtiva? No puede ser sino un proyecto planificado a medio plazo para el que se requiere voluntad política, criterio experto y apuesta decidida de la sociedad civil setabense, bastante más allá del «anar d’esmorzar» y echarse luego a dormir. Con el objetivo principal de ir convirtiéndola en un elemento dinamizador económico, social y sostenible de la ciudad, incidiendo en la difusión nacional, la identidad cultural, la calidad, las infraestructuras adecuadas y suficientes, la innovación tecnológica, la sostenibilidad y la búsqueda de fuentes de financiación. Yendo más allá, comenzando a elaborar y trabajar encuestas entre los expositores para poder evaluar y aplicar mejoras en cada edición, buscando todo tipo de sinergias existentes entre la Fira y los elementos sociales, económicos, y culturales de Xàtiva. El comercio, la industria, el turismo, la cultura, el deporte, la gastronomía o el medio ambiente han de tener directa relación con la Fira y su imagen ha de contribuir a promocionar el nombre de la ciudad. ¿Se empieza ya el camino o se sigue decayendo hasta la casi irrelevancia?

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