Bienvenida multitudinaria en Bocairent a las monjas carmelitas

Nueve religiosas de la congregación procedentes de Piedrahita son recibidas por cientos de personas en la localidad, cuyo monasterio lleva 20 años vacío de vida

Así ha recibido Bocairent a las diez monjas carmelitas descalzas que van a habitar el monasterio de la localidad

Sergio Gómez

Sergio Gómez

Bocairent se ha enfundado hoy en sus mejores galas para brindar una cálida y multitudinaria bienvenida a las nueve carmelitas descalzas que van a habitar el monasterio de la localidad después de 20 años vacío y huérfano de vida contemplativa. Las nuevas "moradoras" del convento bocairentí proceden del monasterio de Piedrahita (Ávila).

De allí han salido a las siete de la mañana para llegar a las seis y media de la tarde a la localidad de la Vall d’Albaida por el puente de Sant Blai a bordo de dos furgonetas, entre el estallido de júbilo y las ovaciones de la muchedumbre congregada, acompañada por el redoblar constante de las campanas.

Las religiosas carmelitas, en Bocairent.

Las religiosas carmelitas, en Bocairent. / S.GÓMEZ

Su primera parada ha sido la residencia de mayores del Sagrado Corazón, en cuyas escalinatas aguardaban cientos de vecinos y, en primera línea, un nutrido grupo de sacerdotes del archiprestazgo, junto a alcaldes y concejales de Bocairent, Agres, Banyeres, Alfafara, Beneixama, Camp de Mirra o Yecla y representantes de las cofradías, «filaes» morocristianas y de otras asociaciones locales. La banda de música interpretó «Febrer», como si de un día de fiesta patronal se tratara.

De hecho, todos los congregados han entonado acto seguido un emotivo Canto a Sant Blai, patrón del pueblo. Las monjas han visitado a los ancianos de la residencia junto al párroco de la localidad, Vicent Femenía, antes de marchar en procesión, a ritmo de dolçaina y tabalet, junto con los colectivos de Bocairent y sus respectivos estandartes, hasta la iglesia, donde se ha cantado el Te Deum.

Las monjas a su llegada a la iglesia de Bocairent.

Las monjas a su llegada a la iglesia de Bocairent. / S.G.

Numerosos vecinos se han acercado a las religiosas (seis de la Comunitat Valenciana y tres de Murcia) para saludarlas y estas han respondido con muestras de afecto, visiblemente emocionadas y agradecidas por la grandiosa acogida.

El alcalde de Bocairent, Xavier Molina, ha señalado que el de hoy es "un día especial de alegría colectiva" y se ha dirigido a las monjas para trasladarles el agradecimiento del pueblo. "Con vuestra venida se construye un nuevo capítulo de la etapa de un monasterio que acompaña a Bocairent desde el siglo XVI", ha indicado, recordando los momentos complicados que vivió la localidad cuando en 2004 se clausuró el convento, posteriormente adquirido por la parroquia con gran esfuerzo.

Ceremonia en la iglesia de Bocairent.

Ceremonia en la iglesia de Bocairent. / S.G.

Un trabajo incansable

El alcalde ha agradecido el trabajo incansable de quienes en las últimas semanas se han dedicado acondicionar el monasterio y que todo estuviera a punto. "Queremos que desde hoy os sintáis bocairentinas, en nombre del municipio bienvenidas y gracias de corazón", ha interpelado a las carmelitas.

Durante la ceremonia eclesiástica, el párroco Vicent Femenia también evocó el mazazo que supuso la disolución de la comunidad de agustinas hace veinte años para poner en valor los constantes intentos que la comunidad parroquial ha llevado a cabo desde entonces para que la vida contemplativa regresara al pueblo y al archiprestazgo tras conseguir -con mucho empeño- la supervivencia del monasterio.

"Después de muchas gestiones nuestras plegarias han sido escuchadas. Ha sido la providencia de Dios la que en el momento más inesperado ha puesto por sorpresa a las carmelitas en nuestro camino. Un regalos de dios que da respuesta ansiada a nuestras oraciones", ha apostillado el sacerdote.

Carmelitas accediendo a la iglesia.

Carmelitas accediendo a la iglesia. / S.G.

Pesar en Piedrahita

La localidad abulense de Piedrahíta, en cambio, despidió con pesar por la mañana a las religiosas que integraban la comunidad del monasterio Amor Misericordioso y de la Madre de Dios, del siglo X, actualmente en venta. La presidenta de la asociación cultural «Alma Máter Arte y Cultura», Ester Bueno, que el pasado agosto solicitó a la Junta de Castilla y León la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) de este inmueble, lamentó la partida de las monjas, que a las 7 de la mañana emprendieron el viaje hacia Valencia para iniciar una nueva etapa en su vida monástica.