El PP logra la decimotercera alcaldía de la Vall tras la moción de censura en Albaida

El popular Juan Carlos Roses asumirá la vara de mando tras el pleno extraordinario de este martes en el que saldrá adelante su propuesta con el aval de dos exregidores del PSPV, que han sido expulsados del partido

Todo preparado para la moción de censura en Albaida con la que el PP se hace con la alcaldía

M. Á. Montesinos

R.Tomàs.

El Partido Popular logrará este martes, 2 de enero, la decimotercera alcaldía en la Vall d’Albaida, después de que prospere -está ya firmada- la moción de censura de Albaida impulsada por los populares con el apoyo de dos regidores tránsfugas del PSPV, que han sido expulsados del partido tras rubricar la propuesta del líder del PP, Juan Carlos Roses, para hacerse con la vara de mando. Los populares desbancarán a Compromís de la alcaldía después de que se debata y se vote la moción de censura en el pleno extraordinario convocado para este martes a las 12 horas en el ayuntamiento. Una moción que ya cuenta con la mayoría de respaldos para salir adelante, 8 de los 13 representantes del consistorio: los 6 votos de los concejales del PP y dos de exregidores socialistas.

Compromís gobierna en minoría desde el pasado mes de octubre, después de la ruptura del pacto de gobierno con el PSPV, tras la negativa de una regidora valencianista a ratificar el acuerdo de gobierno con los socialistas. Mª Àngels Salom se negó a rubricar el pacto de gobierno sellado entre las dos formaciones tras la investidura de Alejandro Quilis (Compromís) como alcalde en junio pasado y los tres ediles del PSPV abandonaron el equipo de gobierno, dejando a Compromís en minoría con cuatro ediles.

En el pleno municipal del pasado mes de noviembre, el PP apuntó a una posible moción de censura, alegando la “catastrófica” situación económica del consistorio. Una moción que se consumó en diciembre pasado, tras atar los populares el apoyo de dos regidores del PSPV, Cristina Vila y Pau Sempere, que fueron expulsados del partido del puño y la rosa tras dar su respaldo a la propuesta.

El portavoz popular, Juan Carlos Roses, justificaba la moción de censura por la “paralización” municipal. En diciembre, tras el anuncio de la presentación de la moción, el líder del PP afirmaba en declaraciones a este diario que la moción “es la única vía posible para salir de esta situación de paralización”, y exponía la pérdida de subvenciones del consistorio en los últimos meses. Roses afirmaba que “el pueblo está abandonado. Albaida está estancada, paralizada, y hemos mirado por el pueblo, por el bienestar de la población”, manifestaba justificando la moción de censura, que se registró en el ayuntamiento el pasado 15 de diciembre. En la misma, el PP reitera que el ayuntamiento “atraviesa un periodo de crisis institucional que ha desencadenado inevitablemente en una crisis económica que imposibilita no solo el crecimiento de la ciudad, sino también un correcto mantenimiento y funcionamiento ordinario”.

El PP ya está trabajando en la conformación del nuevo equipo de gobierno albaidense y, tal como adelantó este diario, los populares asegurarán concejalías a los ediles tránsfugas del PSPV, aunque faltaba concretar estas delegaciones. Roses anunció que trabajarán “conjuntamente” con los dos exregidores socialistas, aunque exponía que “todavía no nos hemos sentado a hablarlo”. Señalaba que hay “consenso para salir entre todos de la situación de parálisis del consistorio” e insistía en que hay voluntad, por ambas partes, de “trabajar conjuntamente por el pueblo”. Roses avanzaba que los dos exediles socialistas “tendrán alguna regidoría”.

El pleno extraordinario para aprobar la moción de censura está previsto para este martes al mediodía. Tras el mismo, Juan Carlos Roses será investido alcalde de Albaida y el PP recuperará la 13ª alcaldía de la comarca, uniéndose a las de l’Olleria, Benigànim, Montaverner, Quatretonda y Alfarrasí. Los populares también gobiernan en pequeñas localidades, de menos de un millar de habitantes, de la Vall como Aielo de Rugat, Rugat, Bellús, Benissuera, el Ràfol de Salem, Guadasséquies y Pinet.

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