La CHJ elimina obstáculos y especies invasoras en el Clariano para prevenir riadas

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, y el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, han firmado este viernes un convenio de colaboración para revitalizar el tramo urbano del río Clariano que discurre entre el Pont Vell y el Pont Nou mediante una serie de actuaciones ya en ejecución que garantizarán un mayor control de las inundaciones y un uso social de la zona, donde se proyecta un parque inundable y una pasarela peatonal para cruzar el cauce en Cantereria.

Polo ha señalado la actuación como un ejemplo y un "caso de éxito" único en toda España tras destacar la "valentía" del ayuntamiento ontinyentí a la hora de expropiar las casas del entorno que se encontraban en riesgo de inundación y de desclasificar el suelo para ganar espacio al río en un contexto de emergencia climática en el que cada vez son más frecuentes los fenómenos extremos como la DANA de 2019.

El presidente del organismo de cuenca también ha destacado como vital la cooperación con el consistorio para poner en marcha el proyecto. "Si las administraciones no van de la mano es imposible luchar contra los fenómenos climáticos", ha subrayado. 

El director de la obra, Emilio Real, ha explicado a pie de campo los detalles de una actuación que pretende mejorar la resiliencia ante avenidas del Clariano mediante la eliminación de obstáculos longitudinales como el que estaba presente en Cantereria y el vial aledaño, retranqueado para reducir su anchura a la mitad, de 6 a 3 metros. Dentro de los trabajos desplegados por la CHJ -con un presupuesto de medio millón de euros- encaminados a la mejora ambiental y la integración urbana y paisajística del enclave se prevé la colocación de pavimento compatible con el parque fluvial en la zona de intervención, que abarca una superficie de unas tres hectáreas.

La CHJ ha instalado una cubierta de lonas durante 18 meses para acabar con la capacidad de propagación de la caña

La Confederación también ha iniciado ya la restauración de la flora del entorno con la eliminación de las especies invasoras y exóticas que pueblan el lecho fuvial. La caña común es el principal enemigo a batir De manera temporal se ha instalado una gran cobertura negra opaca de lonas geotextiles que durante 18 meses acabará con la capacidad de propagación de la caña. Una vez transcurrido dicho periodo, la zona se revegetará con especies arbustivas y acuáticas autóctonas, una medida que mejorará el comportamiento del río frente a las grandes avenidas de agua en caso de episodios de lluvia.

Por último, la CHJ va a acercar a la ciudadanía la zona recreativa que se creará en el Clariano con la habilitación de senderos peatonales de acceso y la futura construcción de una pasarela peatonal inundable que permitirá unir ambos márgenes. El grueso de las obras diseñadas estarán previsiblemente ejecutadas en un plazo de 12 meses.

El alcalde de Ontinyent ha puesto en valor la importancia de que las actuaciones inicialmente planificadas en una parte del río para erradicar el riesgo de las inundaciones se ampliaran para posibilitar "la unión de las dos riberas" del cauce, de forma que "no solo eliminamos la peligrosidad que había para las personas que viven en la otra parte del río, sino que damos al Clariano el espacio que siempre había sido suyo hasta los años 50 y recuperamos un espacio de ocio para el vecindario que va a dotar de una mejor calidad ambiental al municipio", ha destacado.

Adaptación al cambio climático

Rodríguez ha subrayado que para el Ayuntamiento de Ontinyent la adaptación de la ciudad al cambio climático "es una prioridad". "La DANA supuso una lección, pero aprendimos que había que adaptarse, que la realidad cada vez va a ser más compleja y los episodios van a ser más severos", ha señalado, recordando la primera actuación desarrollada en el Benarrai para eliminar el riesgo de inundación con el mismo doble objetivo de "garantizar la seguridad pero también de recuperar espacio para el río y el conjunto de la ciudadanía".

El alcalde ha incidido en que "la CHJ ha sido un aliado a la hora de obtener los permisos y de redactar el propio proyecto", con un trabajo conjunto junto a la oficina técnica municipal. La actuación, según el primer edil ontinyentí, es un "ejemplo de cooperación interadministrativa", puesto que se trata de la primera obra de Ontinyent en la que participan la UE, el Gobierno Central, la Generalitat, la Diputación de Valencia y el ayuntamiento con una inversión conjunta de más de 6 millones de euros. "Hemos conseguido cuadrar el círculo para trabajar por un objetivo común", ha remachado Rodríguez, que ha mosrado la predisposición del consistorio de continuar colaborando con la CHJ para mejorar el entorno.