El paro baja en dos personas en febrero en las tres comarcas y son 10.385 los desempleados

La Vall d’Albaida tira del descenso, al reducir en 28 personas la lista de desempleados, mientras que en la Costera hay 10 más y en la Canal 16 parados más

Empleados trabajando en una fábrica de arcas fúnebres en Xàtiva.

Empleados trabajando en una fábrica de arcas fúnebres en Xàtiva. / Agustí Perales Iborra

El paro ha bajado en 2 personas en el conjunto de la Costera, la Canal de Navarrés y la Vall d’Albaida durante el pasado mes de febrero, según las cifras publicadas por Labora, y al cierre del pasado mes eran 10.385 las personas sin empleo en las tres comarcas. La Vall d’Albaida empuja este descenso, al sacar de la lista de parados a 28 personas, mientras que en la Costera crece los desempleados con 10 personas más y en la Canal hay 16 desocupados más.

El paro registrado en el mes de febrero de 2024 en la Costera se ha situado en 4.472 personas, 10 parados más que en el mes anterior y 234 menos que en el 2023, lo que supone un ascenso mensual del 0’22% y una disminución interanual del 4’97%. En la Vall d’Albaida el paro registrado en febrero de 2024 es de 4.945 parados, es decir, hay 28 parados menos que en el mes anterior y 270 menos que en el 2023, es decir un descenso mensual del 0’56% y un descenso anual del 5’18%. En la Canal de Navarrés hay 968 parados registrados en el mes de febrero de 2024, por tanto, hay 16 parados más que en el mes anterior y un descenso interanual del 3’10%.

En cuanto a la contratación, en la Costera se han registrado 969 contratos, lo que ha supuesto 2 contratos más que en el 2023 es decir un 0’21 % de incremento. Por géneros, en la Costera son 505 contratos, el 52’12%, se han realizado a mujeres y 464, el 47’88%, a hombres. La contratación indefinida mensual es de 478 contratos y la contratación temporal es de 426 contratos, lo que significa un 49’33% y 43’96% respectivamente. Asimismo, los contratos de jornada completa se han situado en el 55’93% y el 44’07% los de tiempo parcial.

En la Vall d’Albaida se han registrado 1.364 contratos, lo que ha supuesto 38 contratos más que en el 2023, un 2’87% de incremento interanual. Por géneros, en la Vall 565 contratos, el 41’42%, se han realizado a mujeres y 799, el 58’58%, a hombres. La contratación indefinida mensual es de 736 contratos y la contratación temporal es de 6.184 contratos, lo que significa un 53’96% y 45’31% respectivamente. Asimismo, los contratos de jornada completa se han situado en el 60’92% y el 39’08% los de tiempo parcial.

En la Canal de Navarrés se han registrado 396 contratos, lo que ha supuesto 78 contratos menos que en el 2023, un 16’46% de incremento interanual. Por géneros, en la Canal 180 contratos, el 45’45%, se han realizado a mujeres y 216, el 54’55%, a hombres. La contratación indefinida mensual es de 95 contratos y la contratación temporal es de 301 contratos, lo que significa un 23’99% y 76’01% respectivamente.

El secretario comarcal de UGT-PV, Raül Roselló, afirma que los datos del paro de febrero “son el reflejo de un mercado laboral sólido, producto de todo el empleo de calidad que se está creando a raíz de la reforma laboral de 2021. Puestos de trabajo estables, asentados cada vez más sobre el contrato indefinido, lo que implica la configuración de unas relaciones laborales más robustas, con una mayor capacidad de resistencia ante contextos adversos”. Para Roselló, “quedan flecos pendientes a mejorar del mercado de trabajo. Uno de ellos es el paro de larga duración, cuatro de cada diez personas paradas llevan más de un año buscando empleo. Una realidad que pone en evidencia la ineficacia de las actuales políticas activas de empleo, en tanto que no son útiles para mejorar la inserción de las personas que más dificultades tienen para encontrar un empleo. Algo que no parece estar solucionando la actual Ley de Empleo, aprobada sin el consenso social, al no proveer de los medios necesarios para que se desarrollen unos servicios para el empleo efectivos, especialmente aquellos relacionados con la orientación profesional”.

Para UGT, aún quedan cuestiones pendientes por completar en la reforma laboral, como la modificación de las causas y el coste del despido, necesaria para dotar a todo el empleo indefinido que se está creando de una estabilidad real, con una indemnización por despido que realmente tenga un carácter disuasorio y resarcitorio. Esto acabaría fomentando otras vías de ajuste alternativas al despido, basadas en la flexibilidad interna, menos traumáticas tanto para el trabajador como para la empresa; aportando a su vez a las relaciones laborales una mayor estabilidad y seguridad, muy necesarias para afrontar los retos futuros de la economía.