Tal como estaba previsto, el actual director del MuVIM, Rafael Company, ha sido el candidato propuesto para ocupar la plaza del máximo responsable del museo de la Diputación. Tras un proceso lleno de suspicacias, paralizaciones, recusaciones y demandas judiciales, el tribunal ha decidido desoir todos los obstáculos de un concurso interno que va en contra de Código de Buenas Prácticas del pacto del Botànic, y decidirse por el aspirante que estaba cantado. El exdirector del MuVIM, Joan Gregori, que era el otro candidato, tiene presentada una demanda judicial por el contencioso-administrativo que podría complicar la decisión adoptada ayer por la Comisión de Evaluación de los candidatos. La última palabra está en manos del juez.
El concurso para elegir al nuevo director llega al contencioso
El concurso público para nombrar director del MuVIM terminó en el juzgado. Tras una primera paralización por la composición del tribunal, y después que la Diputación de València aceptara que un subordinado pudiera estar en la Comisión de Valoración de un superior, el proceso acabó en el juzgado de lo contencioso-administrativo.
Joan Gregori, ex director del MuVIM y candidato al puesto, presentó el recurso judicial. El escrito pide la paralización del proceso en base a la posible imparcialidad del tribunal por la subordinación entre funcionarios. La ley establece que los puestos de trabajo vacantes que son cubiertos por los funcionarios deben ser provistos en convocatoria pública por concurso de méritos o de libre designación, de acuerdo con las normas de todas las Administraciones.
Candidatos
Dos candidatos se presentaban para cada plaza. Para el MuVIM y la Sala Parpalló se presentaban el actual director, Rafael Company y su antecesor Joan Gregori. Company llegó al museo provincial en septiembre de 2015, en unos de los primeros nombramientos firmados por el entonces presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, y presentados por la vicepresidenta Maria Josep Amigó.
