Faltan las puertas de madera y el número 10 y las siglas FF esculpidas en piedra, faltan las rejas de los ventanales donde no hace tantos años los fascistas hicieron explosionar una bomba, falta el edificio pero no el espacio. La exposición “Joan Fuster en el seu temps” que esta tarde se inaugura en el Centre del Carme traslada el Espai Fuster de Sueca, la vivienda en la que vivió y escribió el pensador valenciano, al centro de València. Allí están sus libros, sus revistas, sus documentos, sus recuerdos y están las imágenes de sus amigos, sus conocidos y sus saludados, los que acudían cada día a aquella casa agraria y modernista en busca de charla, consejo o promoción, en busca de la palabra del intelectual valenciano más importante del siglo XX.
Y en “Joan Fuster en el seu temps” también está el arte que rodeaba a Fuster y que supuso una de sus grandes inquietudes intelectuales, como ya demostró en 1955 con “El descrèdit de la realitat”. La exposición en el Centre del Carme recopila una rica colección de obras, entre las que hay 28 esculturas de José Cusachs, Manolo Boix y Andreu Alfaro; 62 pinturas, dibujos y obra gráfica de artistas como Artur Heras, Pilar Dolz, Miquel Navarro, Juan Genovés, Antoni Miró, Antoni Tàpies, Josep Renau, Joan Miró o el Equipo Realidad.
La muestra incluye, además, ocho dibujos originales del propio Fuster y una pintura de corte abstracto titulada “Viatge del general Franco a la sífilis” que el pensador de Sueca entregó en 1950 como regalo de boda a su amigo, el poeta e historiador saguntino Jaume Bru.
El secretario autonómico de Cultura y Deporte, Ximo López Camps, ha presentado esta mañana la exposición a los medios junto al comisario de la muestra y de l’Any Fuster, Francesc Pérez Moragón, y el expresidente de la AVL, Ramon Ferrer, entre otros. “Estamos ante la mayor exposición organizada para hacer valer la trayectoria de un intelectual lúcido, inconformista y arriesgado. Un agitador de conciencias y de cultura. Posiblemente el intelectual valenciano más importante del siglo XX”, ha subrayado López Camps.
Según Pérez Moragón “Joan Fuster en el seu temps” ofrece una visión de un personaje tan contradictorio como fue el ensayista de Sueca pero también que su pensamiento “no se muere nunca ni se deja vender”.
Trayectoria vital y literaria
La exposición -que forma parte de las conmemoraciones del centenario de Fuster y que se podrá visitar hasta el 26 de febrero- se estructura en bloques temáticos interconectados por paneles dedicados al escritor por el Equipo Realidad en 1966. El objetivo de estos bloques, según los responsables de la exposición, es ofrecer una visión global y completa de la dilatada trayectoria vital y literaria de Fuster, permiten captar la pervivencia de su legado intelectual y material en nuestros días.
La visita se inicia con “Primers passos” y “Un món menut”, los bloques dedicados a la familia, la infancia, la adolescencia y la Sueca de Fuster, con las fotos de sus padres, sus notas escolares e incluso las notas autobiográficas que en 1962 le envió a Josep Pla para que el escritor catalán le dedicara uno de sus “Homenots”.
El siguiente bloque vislumbra los inicios literarios del escritor, sus primeras colaboraciones en prensa, sus estudios como la “Antología del surrealismo español” que realizó junto a José Albi y sus primeros escritos poéticos en revistas como “Verbo”, “Esclat”, “Pont blau” o “La nostra revista”.
Seguidamente, se aborda el Fuster que inicia trabajos clave de concienciación valenciana y valencianista. Se trata de un apartado titulado ‘Una mirada valenciana’, que profundiza en la agitación que supuso en el panorama político y cultural la publicación en 1962 de ‘Nosaltres els valencians’ y ‘El País Valenciano’. Aquí vemos a Fuster con Sanchis Guarner, Vicent Ventura, Raimon o Francesc Vañó; encontramos la primera página original manuscrita de “Nosaltres els valencians” y su respectivo expediente de censura; y una copia de “Reflexions d’un ninot de falla”, el artículo en el que el propio Fuster narraba la “cremà” de su efigie durante la Cabalgata del Ninot de 1963 por la publicación de “El País Valenciano”.
El "observador implacable"
Este Fuster incómodo para una parte de la sociedad valenciana está representado en “Observador implacable”, donde vemos las pintadas en contra del pensador en su casa de Sueca o en la librería Dau al Set, así como los artículos aparecidos en Levante por el atentado con bomba que sufrió en su vivienda en septiembre de 1981. Pero también se recogen las muestras de apoyo que recibió Fuster ante esta hostilidad en forma de manifestaciones y homenajes.
En ‘Provatures, interpretacions’, la exposición se sumerge en toda la trayectoria ensayística de Fuster, para pasar después a su vertiente periodística con el bloque ‘En paper de periòdic’. Y en ‘Professor, a classe!’, aborda su relación con la vida universitaria. “Influència i lideratge” da cuenta de su relación intelectual y amistad personal con algunas de las figuras más importantes de la cultura y la sociedad de su época como Josep M. Cruzet, José L. López Aranguren, Castellet, Pla, Sanchis Guarner, Estellés, Burguera, Miquel Batllori o Jordi Pujol.
“Y morir debe de ser eso, dejar de escribir”, plasmó Fuster en uno de sus aforismos. “El soterrament” despide la exposición con imágenes de sus amigos Raimon y Annalisa Corti, Andreu Alfaro y Doro Hoffman acudiendo a su casa tras conocer su fallecimiento el 21 de junio de 1992. También se muestran fotos de su multitudinario funeral por las calles de Sueca o su llegada al cementerio de la localidad de la Ribera, donde fue enterrado en el pabellón de personas ilustres.
Se trata, tal como ha resumido el secretario de Cultura, López Camps, de un recorrido para visitantes muy diversos: los que conocen a Fuster y los que no. “Pero también tiene la capacidad de dirigirse a muchas generaciones distintas y cada una de las personas que visite esta exposición le sacará más jugo por unos aspectos u otros, según sus gustos personales”.
López ha apuntado que la exhibición inicia "la semana grande" dedicada al autor de Sueca (Valencia), en la que el próximo miércoles 23 de noviembre se conmemora el centenario de su nacimiento. Asimismo, ha resaltado que 'Fuster en el seu temps' se desarrolle en el Centro del Carme, "un lugar de cultura contemporánea" para acoger a un pensador y escritor que "toda su vida estuvo pensando y escribiendo" en torno a "la cultura contemporánea".
