Salen a la venta un joven Sorolla y dos Hiepes nunca vistos

Joaquín Sorolla y Tomás Hiepes son sinónimos de suculentas cifras en las casas de subastas. Los dos artistas valencianos serán algunos de los protagonistas de la próxima venta de arte en Segre, que tendrá lugar el día 21 en Madrid.

En concreto, la casa de subastas pone a la venta por 100.000 euros el lienzo Duelo en una hostería, pintado por Sorolla en 1887 en Roma. De él, recuerda Segre que Sorolla llegó a la capital italiana en 1885 para tomar posesión de la plaza de pensionado que le había concedido la Diputación de València. Allí trabaja en la realización de varias obras que deberá remitir a la diputación valenciana. «El pintor se interesó por los cuadros de pequeña historia, es decir, en escenas de género que se inspiran en episodios históricos o literarios, muy de moda en aquel momento entre la burguesía europea», explican. Así, Duelo en una hostería representa a tres soldados en un interior vestidos a la moda española del Siglo de Oro «mientras urden un plan belicoso». «El joven artista -añade Segre- en un alarde de dominio técnico recrea la escena con rigor historicista mediante una composición de gran viveza y dinamismo en la que cada personaje esta involucrado en una acción concreta que invitan al espectador a imaginarse su desenlace. Un interesante precedente lo encontramos en la obra En la posada (óleo sobre tabla, firmado y fechado en 1883, 27,4 x 17 cm) del Museo Sorolla de Madrid».

Mientras, de Tomás Hiepes (1610-1674) salen a la venta dos bodegones inéditos por 90.000 euros cada uno: Bodegón con cesta de barquillos, turrones y roscos sobre mesa con mantel bordado y Bodegón con bandeja de pasteles, fruta confitada, peladillas y otros objetos sobre una mesa con mantel bordado. Este artista, explica Segre, «fue el pintor de bodegones más célebre de València durante el siglo XVII. Al igual que otras regiones de España, la pintura de naturalezas muertas en València no comenzó a despuntar hasta la década de 1640. Sus composiciones se distinguen por un halo minimalista, y encanto arcaico».

Hermano de una confitera

La documentación que tiene la casa de subastas revela que «la hermana de Hiepes, Vicenta, era la dueña de una confitería donde confeccionaba dulces y confituras, los mismos temas que luego predominarán en sus pinturas». «Esta importante e inédita pareja de bodegones de dulces y postres de Hiepes pueden relacionarse con algunas obras tempranas del pintor que conservan el mismo esquema compositivo, disposición frontal y claroscuro que definen buena parte de su producción temprana», señala Segre. 

Ambos bodegones «evidencian su maestría en describir las delicadas puntillas de encaje, la transparencia de la cristalería y las complejas e intrincadas formas de los dulces artesanales. La contenida simplicidad y aparente simetría de la composición han sido interrumpidas por algunos objetos dispuestos al azar. Estas obras están directamente relacionadas con los lienzos que unos años antes había pintado en la corte Juan van der Hamen y León», concluye Segre.

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