Efe, León

El Cementos La Unión Ribarroja logró su quinto título de la Copa de la Reina de balonmano femenino -antes como AT Constructora Estelles y Ferrobus Mislata- tras imponerse en la final por 26-27 a la auténtica revelación del torneo, el Akaba Bera Bera que vendió cara la derrota, después de haber eliminado en cuartos y semifinales al Elda y Astroc Sagunto, dos de los favoritos.

El conjunto valenciano tendrá la oportunidad de lograr el doblete en las competiciones nacionales, ya que al trofeo copero puede unirle el título de la Liga Costa Blanca ABF, en la que ocupa el primer lugar en la clasificación.

Llevó el control del marcador el Cementos La Unión Ribarroja, primero con diferencias de entre uno y dos goles para, tras un acelerón mediado el primer período y después de un parcial de 1-4, lograr su máxima renta de cuatro goles (7-11).

La guardameta internacional Maruja Sánchez volvió a demostrar su experiencia y por unos instantes frustró claras opciones de gol del Akaba Bera Bera que, tras la entrada en la portería de Jockelyn Tienstra logró volver a entrar en el encuentro, a pesar de que al descanso la ventaja seguía siendo levantina (12-14).

La segunda mitad condujo a una mayor igualdad, ya que el Akaba Bera Bera fue capaz de culminar la remontada y colocarse por primera vez por delante en el marcador (15-14, min.34), para entrar en una fase de tremenda igualdad, en la que aparecieron los nervios y con ellos las imprecisiones.

Después de varios minutos sin que se moviera el electrónico (19-19), el Ribarroja encontró en la internacional Marta Mangue el mejor argumento para desequilibrar, y con sus robos de balón y penetraciones, se convirtió en la máxima realizadora de su equipo llevando al mismo al título. El Bera Bera, que había aguantado con la inspiración de la guardameta holandesa Trienstra y la efectividad de Tati Garmendia, acabó rindiéndose tras situarse la desventaja en tres goles, aunque tuvo arrestos para colocarse en los últimos segundos a tan sólo un gol.