Entrevista | Sergio Giménez Director de Negocio en Aimplas

Sergio Giménez (Aimplas): «Gracias a los plásticos hoy en día podemos vivir más y mejor»

«Si fuera posible sustituir todos los plásticos del mundo por otro material generaríamos casi el triple de emisiones para los mismos productos durante su vida útil», sostiene Giménez

Sergio Giménez.

Sergio Giménez. / ED

Futuribles.

Futuribles. / ED

¿Cómo contribuyen los plásticos al desarrollo económico y social? 

Gracias a los plásticos hoy en día podemos vivir más y mejor. Son materiales versátiles y ligeros, resistentes y seguros, unas propiedades que ningún otro material combina, y que nos permiten llevar a cabo avances muy variados. Por ejemplo, gracias a los plásticos somos capaces de alargar la vida de los alimentos, consumirlos de forma segura y evitar, además, su desperdicio. Otro sector que se beneficia de las ventajas que aportan los plásticos es el sanitario, tanto en forma de material desechable para la prevención de infecciones, como en los quirófanos donde se emplean materiales inteligentes o biocompatibles para realizar cirugías complejas. También en el sector de la construcción el plástico se utiliza como material de aislamiento que ahorra energía y proporciona confort o en el sector de la movilidad los plásticos dan forma a nuevos materiales ligeros que reducen el impacto de nuestros vehículos. 

¿Los plásticos nos van a acompañar siempre?

A la hora de desarrollar un nuevo producto o mejorar el actual, una premisa clave debe ser que tenga el mínimo impacto ambiental y, en la mayoría de los casos, los plásticos siguen siendo la mejor opción. Si fuera posible sustituir todos los plásticos del mundo por otro material estaríamos empleando casi cuatro veces más materia prima, más del doble de energía y generaríamos casi el triple de emisiones para los mismos productos durante su vida útil. Es más, si se hiciera un análisis del ciclo de vida de muchos productos que se nos venden como más sostenibles nos daría como resultado que, en la mayoría de las aplicaciones, el plástico es el más sostenible. La imagen negativa que se le da al plástico es injusta y contra ello tenemos que luchar. El sector está trabajando en nuevos modelos de negocio que permitan hacer productos más duraderos, reutilizables o reparables y en todos los casos usando plásticos reciclados. Así que sí, los plásticos nos van a acompañar por mucho tiempo. Sin ellos retrocederíamos 100 años. 

¿Cuáles son los principales retos a los que se debe enfrentar la innovación en plástico para avanzar hacia una economía circular?

La evolución de los materiales plásticos presenta varios retos, por un lado, la obtención de materiales más sostenibles como la incorporación de reciclado, la obtención de materiales de fuentes renovables y en algunas aplicaciones concretas el uso de materiales biodegradables y compostables. Por otra parte, adaptarse a los nuevos modelos de negocio como la reparación y la reutilización. Y, por último, y quizás el reto principal, es la capacidad de separar y gestionar bien todos los flujos de residuos y tener para cada uno de ellos los procesos de reciclado adecuados, como por ejemplo ocurre en los plásticos mezclados o multicapas.

¿Qué grado de concienciación tienen las empresas del sector de los plásticos hacia la adopción de estas innovaciones tan necesarias? 

Diría que hoy en día el nivel de concienciación y de compromiso es muy elevado y con la nueva legislación todavía más. Esto no implica que todas las soluciones que podemos ver en el mercado sean las mejores en cada caso. Se está dando mucho greenwashing y soluciones que se venden como más sostenibles y que realmente no lo son. Para evitar esto, debemos promover el uso de herramientas objetivas como el Análisis de Ciclo de Vida o la huella de carbono para medir el impacto ambiental y apostar por la certificación para demostrar que lo que se desarrolla es la mejor opción posible. 

El del plástico se caracteriza por ser un sector flexible y capaz de adaptarse a entornos cambiantes. También está acostumbrado a innovar, a la mejora continua e incluso a la reconversión del negocio. Se apoya en una infraestructura fuerte de investigación y desarrollo que proporcionamos desde Aimplas como centro tecnológico y con las ayudas a la I+D+i de las administraciones públicas.

¿Qué implicación tienen estas ayudas a la I+D+i en el desarrollo y la sostenibilidad del sector de los plásticos?

La financiación en innovación desde el ámbito regional, nacional y europeo es fundamental para que podamos seguir contribuyendo a resolver los retos que se plantea la sociedad en relación con los plásticos, para mejorar la calidad de vida de las personas y asegurar la sostenibilidad medioambiental.

En este sentido es conveniente destacar el apoyo del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), gracias al cual podemos abrir, junto con las empresas, nuevas líneas de investigación con una visión a medio y largo plazo lo que permite a la Comunitat Valenciana estar a la vanguardia de la innovación, adelantarse a las demandas del mercado y mejorar su competitividad, generando riqueza y empleo.

Como ejemplo de acciones concretas, hemos avanzado en nuevas técnicas de plasticultura que mejoren la calidad del suelo y el rendimiento de los cultivos, tecnologías disruptivas que aceleren la transición energética como celdas solares más económicas, flexibles y menos contaminantes, o soluciones que nos permitan avanzar hacia una medicina cada vez más personalizada con soluciones adaptadas a las necesidades de los pacientes. También hemos trabajado en nuevas metodologías de descontaminación para usar materiales plásticos reciclados en envases alimentarios, o en investigaciones de nuevos protocolos de síntesis y reciclado de plásticos mediante la mecanoquímica, una alternativa más sostenible y energéticamente eficiente.

¿Cómo se alinea el sector del plástico con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)?

La industria del plástico tiene un papel clave en el modelo de Economía Circular, y por lo tanto se alinea con el ODS 12 (Producción y consumo responsables) que hace referencia directamente a la urgencia por reducir considerablemente la generación de desechos mediante actividades de prevención, reducción, reciclado y reutilización. El sector de los plásticos asume este reto como una oportunidad para comercializar productos más sostenibles gracias al ecodiseño, mejorar los sistemas de gestión y los procesos de reciclado para la valorización de residuos que puedan ser usados como materia prima. 

Además, los materiales plásticos son aliados contra el cambio climático, ya que reducen las emisiones de CO2 respecto a otros materiales, con lo que están alineados con el ODS 13 (Acción por el clima). Por supuesto, también lo están con la innovación y, por tanto, con el ODS 9 (Industria, innovación e infraestructura), ya que apostamos por la innovación en plástico para que las empresas del sector puedan seguir ofreciendo productos seguros, que mejoren la calidad de vida de las personas y sean respetuosos con el medio ambiente. 

Y tampoco hay que olvidar el ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico) que habla de elevar la productividad de las empresas mediante la diversificación, la modernización tecnológica y la innovación, y de mejorar la producción y el consumo eficientes de los recursos mundiales y procurar desvincular el crecimiento económico de la degradación del medio ambiente. Son metas, sin duda, muy alineadas con el cambio a un modelo de economía circular y con la utilización de plásticos reciclados.