La empresa valenciana Robotnik y el centro tecnológico catalán Eurecat han desarrollado un robot terrestre para el transporte autónomo de materiales en los sectores de la industria y de la construcción. Impulsado dentro del proyecto europeo Cobolleague, el robot se desplaza de forma autónoma en entornos industriales exteriores, que se caracterizan por ser terrenos irregulares y por tener una gran variedad de obstáculos estáticos y dinámicos. El dispositivo es una base móvil modular todoterreno diseñada para el transporte de cargas de hasta 200 kilos de peso. Su diseño incluye recursos que permiten el seguimiento de personas, la detección de gestos y el control por voz. El robot es capaz de generar un mapa de su entorno y localizarse y navegar en él de forma fiable y segura. Puede realizar trabajos de transporte entre plantas o tareas de transporte de última milla. Además, el mapa le sirve para identificar todos los obstáculos, así como posibles acantilados y huecos por donde puede caer el dispositivo o recopilar datos en entornos de la construcción que luego se pueden usar junto con el sistema de modelado de información para la edificación BIM (Building Information Modeling).

Roberto Guzmán, CEO de Robotnik, asegura que el proyecto demuestra «la utilidad de la robótica móvil para aplicaciones en las que se realizan tareas repetitivas, en este caso, automatizando el transporte exterior en industria y construcción. Nuestra experiencia de casi veinte años en robótica de servicio nos permite adaptar nuestros robots a diferentes aplicaciones».

El director de la Unidad de Robótica y Automatización de Eurecat, Daniel Serrano, añade que tras más de una década de investigación en localización y navegación autónoma, con este proyecto han conseguido «desarrollar una localización y mapeado en 3D que aprovecha el modelo del edificio extraído directamente de BIM. Esto demuestra el potencial de la aplicación de robots de servicios en el sector de la construcción donde hay recorrido de futuro».