Elena Casa ha obtenido este año el segundo premio Maximiliano Thous del concurso de «llibrets» de fallas que convoca Lo Rat Penat. Esta matemática castellanohablante que trabaja en el departamento administrativo de una importante empresa de cava asegura que la poesía es algo innato en ella.
¿Cómo llega usted al mundo de los «llibrets»?
Tengo afición por la poesía desde que era pequeña, siempre he escrito poesía para las falleras de mi comisión (Cervantes-Padre Jofré). En 2006 me propusieron hacer el «llibret» infantil y gané el primer premio de la sección. Yo soy licenciada en Matemáticas, que no tiene mucho que ver con la poesía, pero esto es algo que sale de mí, es innato. Mi familia además me apoya, sobre todo, mi marido porque yo soy castellanoparlante y el me ayuda a traducir los textos.
¿Qué representa el galardón?
Una ilusión grandísima. Para una persona que habla castellano como yo es todo un logro poder escribir poesía en valenciano con la dificultad añadida de darle el punto jocoso y de chanza. Los cursos de poesía en valenciano que he hecho en Lo Rat Penat me han ayudado mucho pero aún así es un esfuerzo.
¿Le parece adecuado un concurso con casi cien premiados?
Pienso que todo el que escribe un «llibret» hace un esfuerzo y es una manera de reconocerlo aunque sea con décimo accesit de la última sección.
¿Cree que el concurso de Lo Rat Penat tendrá futuro si cambia el color político en el gobierno de la ciudad?
Lo Rat Penat es una entidad independiente de la política. Ni la izquierda ni la derecha le han ayudado nunca, salvo cuando llegan elecciones. Se financia con aportaciones privadas, afortunadamente, y por eso creo que seguirá existiendo. Es necesaria porque el valenciano que se imparte en las escuelas no es valenciano.
¿Qué opina del discurso de la alcaldesa en la «crida» y la controversia del «caloret»?
Lo siento mucho por Rita Barberá porque es un baluarte para Valencia pero no hay derecho a que en una ciudad donde el valenciano se pide hasta para opositar a barrendero la alcaldesa use ese vocabulario. Si se queda en blanco, que le puede pasar a cualquiera, que hable en castellano. Rita Barberá lleva años suficientes de alcaldesa como para tener un mínima noción del valenciano.
