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Entrevista

"En las Fallas hay 3 cosas que no hay que tocar: bandera, lengua y religión"

Guillermo Serrano, nuevo presidente de la Interagrupación

Guillermo Serrano, de 50 años, pertenece a la comisión de Cádiz-Los Centelles y es presidente de la Agrupación de Russafa. M. Domínguez

Al lío: ¿cuando hay que poner las carpas en las fallas de 2020?

Es un tema que requiere un estudio profundo y serio. No se puede hacer una norma general porque es un año muy especial y muy complicado. Poner una carpa tres días y luego estar cinco sin utilizarse... hay que ver cómo se hace eso. Nuestra intención es adelantarnos a los problemas y no esperar a la reunión del bando. Creo que hay que estudiar muchos casos particulares. Que la fórmula no sean tres supuestos, sino más. Este año hay que llegar a una conciliación muy especial. El vecino no fallero tiene este año, además, el problema de que todos los días de fallas son laborables.

La lectura de su nombramiento es la de el inicio de una nueva era, con nuevo talante.

Puedo prometer trabajo, esfuerzo y conciliar la mayor cantidad de acuerdos con la mayor cantidad de entidades posibles. La Inter está para hacer la vida más fácil posible trabajando con las administraciones. El talante no sé si es distinto, pero vamos a intentar cambiar o mejorar cosas para que todo sea más fácil. Pero los diálogos son entre dos partes

Ha habido una Interagrupación muy cómplice con el concejal; otra apática, otra que estuvo a punto de irse al garete por luchas internas, otra con ningún entendimiento con el concejal... ¿Cual es el formato perfecto para la Interagrupación?

La Inter debe jugar un papel de mostrar no tanto fuerza o poder como ser un interlocutor válido, que los presidentes se sientan arropados y que ante cualquier problema tenemos que trabajar e intentar forzar una solución.

Renovación, limpieza, purga... sólo quedan Iván Heredia y Jordi Palanca.

Cuando empecé a plantearme optar a la presidencia fui a hablar con cinco o seis personas de un ámbito cercano, que sabe más de fallas que yo, hablé con ellos... mi intención era hacer un equipo de espíritu conciliador, como creo que soy yo. Sólo he nombrado al secretario general y a los que llevan cada área. Ellos harán sus equipos. Sí. quedan Jordi e Iván, hay tres caras nuevas, que no son nuevas en el mundo de las fallas como Nico Garcés, Miguel Prim, José Acosta, más Carmen Sabater. Creo que es un buen equipo.

Sólo una mujer. Pere se va a enfadar.

Las Fallas son reflejo de la sociedad. Y yo pienso que la mujer estará donde quiera estar. Antes no había presidentas y ahora hay una barbaridad de presidentas, en solitario y en gestoras. A mi me importa la capacidad y la disponibilidad. Está Carmen, una persona muy capaz. No me he planteado si tiene que haber ninguna, una, dos o catorce. No me habría creado ningún estrés. No me gustan los empujones absurdos.

En las anteriores elecciones la Inter se partió en dos geométrica y aritméticamente. Las elecciones son legítimas, pero, ¿salir por aclamación es mejor?

Como en una falla cuando se vota si se dice que «se parte en dos» y no necesariamente. Es cierto aquello fue algo extraordinario por inusual. Pero en este caso ha habido veinte agrupaciones y todas han votado a favor tras explicar nuestro ideario. Con la ayuda de todos podemos hacer un buen trabajo.

Todos sabemos los desencuentros con el concejal y/o el ayuntamiento. Pero ¿no han quedadas difuminadas cosas más importantes?

Creo que uno de los mayores incomodidades que tienen las fallas no es ya la secretaría virtual, sino que cada vez que haces un trámite te aparecen cuatro o cinco documentos que te tiene que firmar éste, el otro... queremos hacer un gabinete, no sé si de crisis o de qué, para tratar de allanar este camino.Ahora, un secretario de falla se pasa todo el año lidiando con trámites, desde la verbena de San Juan a la churrería. Y al año siguiente, cuando ya cree que lo sabe, te aparecen documentos nuevos. Es una locura. Necesitamos que todo sea comprensible.

De los temas de desencuentro, ¿cual fue el que más se podía haber ahorrado Fuset?

La encuesta sobraba porque no hacía falta. Para que en las Fallas se demuestre que hay diversidad no hay más que pasarse por tres casales para demostrarlo. En las Fallas siempre hemos dicho que hay tres temas que nunca hay que tocar: el idioma, la bandera y la religión. Y así nos llevamos bien.

¿A quien prefiere de concejal de Cultura festiva?

Me tengo que entender con quien sea. Nosotros tenemos nuestro momento cuando votamos y a partir de ahí delegamos en el político la voluntad de entenderse y luego entendernos nosotros con quien salga.

Los días son intensos. Que si Pere Fuset, que si Pilar Bernabé, que si la tercera vía de Galiana...

¡Desde fuera es muy entretenido! (Ríe) Ahora sube uno, baja otro, ahora tiene más posibilidades aquel... nos queda una semana de tensa espera.

¿Su relación con Pere Fuset?

Siempre he dicho que tengo una buena relación con él. Y hemos tenido encuentros y desencuentros. Pero trabajamos por lo mismo. No tendría ningún problema con él.

¿Con Pilar Bernabé?

Tengo muy buena relación desde que me la presentaron. No puedo hablar políticamente de ella porque aún no la conozco. Puede contar con nosotros y sólo pedimos que nos ayude.

¿Si aparece una tercera vía?

Veremos quien es y a partir de ahí, a valorar (rie)

En las discusiones del último bando, usted se calentó con la delegada de la Confederación de Empresarios.

No sé si expresó bien, pero dijo es que «lo que sobran en Fallas son las fallas». Claro... en ese momento te quedas en shock. Quizá fue un exceso verbal. A mi no me tienen que explicar las molestias que pueden causar las fallas, pero que sobramos... me enfadé.

¿Donde empieza la legitima defensa de lo que hacen las fallas y donde el exceso de victimismo de «están todos en mi contra»?

Como todo, en el centro, en el medio. No me gusta ni ser víctima ni decir que «esto lo pago yo». Ni somos tan malos ni lo hacemos todo bien. Nos falta autocrítica, pero a todos.

Usted forma parte de una plataforma cívica en Russafa

Y ahí hay veces que te encuentras con muchos latiguillos. «Hacéis lo que os da l agana, ponéis la churrería...». Una vez le dije a un hostelero que para abrir un negocio seguramente no tienen que hacer tantos papeles como yo con la churrería. Y nosotros hacemos lo que las normas nos exige.

¿Usted habría ido a la manifestación del 9 d'Octubre a la que fue Jesús Hernández Motes?

Aunque tuviera todo el derecho a ir, yo no lo habría hecho. Porque era ponerla botando para que pasara lo que pasó. Yo creo que en parte se le machacó, porque luego llega un concejal (Grezzi), corta una calle y puede hacer lo que quiera con los colectivos que quiera. No me gusta la falta de equidistancia pero seguramente yo no habría ido porque no era necesario exponerse.

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