Cocas a gogó en el cierre de campaña en Xàbia

No hay tentempié más callejero y mitinero. Tras el batiburrillo de la última “picaeta”, moderación y reflexión

Las cosas y empanadillas del cierre de campaña del PP de Xàbia

Las cosas y empanadillas del cierre de campaña del PP de Xàbia / A. P. F.

Alfons Padilla

Alfons Padilla

La ideología es nutritiva. La ideología da de comer. Más de uno se las ha apañado estos días para cenar noche sí y noche también fuera de casa. Los gorrones han estado en su salsa. Los mítines llenan la cabeza y la panza.

Acaba la campaña del palo y tentetieso. Acaba con tentempié. La fiesta electoral es un festín, una alegre cuchipanda.

Y toca hacer un elogio de las cocas. Son pura gastronomía de la Marina Alta. Saben a horno de leña y a calle. No hay nada mejor para hincarle el diente cuando se está de plantón. Las cocas xabieras tienen el tamaño perfecto. Son más pequeñas que la circunferencia de la mano. Se liquidan en dos bocados y, mientras tanto, se le da al palique. Se farfullan pronósticos. Con la mano que queda libre, se sostiene la birra.

De la cocina callejera de otras culturas se habla mucho, pero las cocas no tienen rival. Son un refrigerio insuperable.

El variado ágape del PSOE de José Chulvi

El variado ágape del PSOE de José Chulvi / A. P. F.

El fin de campaña es el momento del todo el pescado está vendido. Ya no quedan ni las migas de la indecisión. Los partidos se estiran en la última noche. En Xàbia, siempre es Ciudadanos por Jávea el de más guiso. Repartió raciones de clóchinas y albóndigas. Mientras, el PSOE de José Chulvi preparó un ágape bien variado de delicias frías. Las cocas volaron. De “tomacat” y luego, de postre, coca maría. El PP de Rosa Cardona también dio cocas y empanadillas. Ha sido una campaña de masas (de trigo).

Cacerola de clóchinas tras el último mitin de Ciudadanos por Jávea

Cacerola de clóchinas tras el último mitin de Ciudadanos por Jávea / C. L.

La “picaeta” se alargó. La campaña también es un batiburrillo de sabores. Hay que probarlo todo. Y hoy, en la jornada de reflexión, el cuerpo y la cabeza rebullen. Toca moderación (verdura y fruta). La reflexión depura. Se acabaron los atracones.