Xàbia, en el camino de la excelencia turística

El plan estratégico y la declaración de municipio turístico marcan el rumbo para avanzar en sostenibilidad, accesibilidad y destino inteligente

La bahía del Portitxol, en una imagen tomada desde el mirador del Cap Negre

La bahía del Portitxol, en una imagen tomada desde el mirador del Cap Negre / A. P. F.

teresa andreu. xàbia

La palabra clave es destino. Xàbia es un destino turístico que aspira a la excelencia. Sí, ser destino significa estar siempre avanzando. Explorar nuevos caminos para mejorar la experiencia turística y conseguir que este municipio continúe enamorando y ejerciendo ese influjo tan mágico que lleva a los visitantes a proclamar que es el paraíso. El extraordinario paisaje explica parte de ese hechizo. Pero hay más. Claro que hay más. La gestión eficiente también ayuda. Y mucho.

Ser destino también obliga a asimilar rápidamente los hitos que se conquistan y plantearse nuevos retos. Xàbia ha logrado ahora dos metas importantísimas. El Consell le ha otorgado la distinción de municipio turístico, lo que permite al ayuntamiento optar a financiación extraordinaria de Turisme Comunitat Valenciana. Xàbia dispondrá de más recursos para seguir mejorando sus servicios y corregir esa brecha entre el pueblo que es (bendita esencia de pueblo) y la ciudad turística del verano.

El desafío es mantener el espíritu del pueblo y contar con servicios de ciudad. La gestión eficiente también contribuye a ese objetivo. Al mismo tiempo, la sostenibilidad y el buen uso de los recursos naturales (el agua, el paisaje, el litoral y los parajes protegidos) sitúan al municipio en una posición de ventaja para afrontar los nuevos desafíos turísticos.

El otro hito alcanzado ahora ha sido el de aprobar el plan estratégico de turismo. Xàbia tiene un plan. Un plan que conduce a la excelencia.

En realidad, el título de municipio turístico y el plan estratégico se complementan. Sin una estrategia enfocada a la sostenibilidad y la eficiencia de los servicios no se puede lograr esa distinción. Y sin ese reconocimiento también resulta complicado incrementar recursos y trazar las líneas de presente y futuro. Entre esas líneas, destacan la accesibilidad y la aplicación de tecnologías de vanguardia para que Xàbia se convierta en un destino (de nuevo, la palabra destino) inteligente.

Otro de los mimbres de la Xàbia turística que innova, es accesible y quiere ser referente de sostenibilidad es la participación. El plan estratégico insiste en que todos los sectores implicados en el turismo (en realidad, todos los agentes sociales del municipio tienen mucho que aportar) deben intervenir activamente en las políticas de promoción y de gestión. Los consejos de participación, la reuniones sectoriales, los foros (el último ha estado dedicado a la seguridad ciudadana; Xàbia ha sido sede de una reunión del Fórum Español para la Prevención y la Seguridad Urbana) son esenciales en ese modelo en continua construcción del destino de excelencia.

Sí, Xàbia está en el camino de la excelencia y, al mismo tiempo, la excelencia es el camino, dado que hay que mejorar y avanzar continuamente. El turismo es dinámico. Las necesidades cambian a velocidad supersónica.

El municipio ya dispone de herramientas para encarar todos los retos. La experiencia la tiene. Y el llamado «escenario» turístico es incomparable. El paraíso, sí. Xàbia maravilla con su costa de acantilados y de calas. La playa familiar del Arenal recupera el brillo. Los centros urbanos (casco antiguo, núcleo marinero de Duanes y núcleo del Arenal) poseen cada uno una idiosincrasia especial y única y coinciden en la hospitalidad. Las mejoras urbanas acrecientan su atractivo. Las rutas por el parque natural del Montgó y los parajes litorales (los miradores turísticos se asoman a un paisaje embriagador) representan el turismo saludable que también es una de las señas de identidad de Xàbia. La gastronomía mediterránea (dos restaurantes con tres estrellas Michelin y establecimientos con excelente cocina de mercado y proximidad) son otro de los atractivos. Y la historia milenaria (y los extraordinarios tesoros arqueológicos) sitúan a Xàbia como destino cultural y patrimonial.