Bimbo parará la producción en la fábrica de El Verger el 22 de marzo

Los trabajadores salen este lunes a las 5 de la madrugada en autobús hacia Madrid para realizar una concentración ante la sede social de la multinacional

La empresa ha mejorado las condiciones de traslados a la planta de Paterna e indemnizaciones, pero es inflexible en cuanto al cierre

La manifestación contra el cierre de la planta de Bimbo en El Verger

La manifestación contra el cierre de la planta de Bimbo en El Verger / A. P. F.

Alfons Padilla

Alfons Padilla

Colorín, colorado. La historia de Bimbo (antes Madalenas Ortiz) en la Marina Alta tiene ya los días contados. El modelo económico de la comarca se empobrece. La aventura empresarial que inició en los años 60 José Ortiz Savall, un emprendedor dianense que venía de familia de panaderos, llega hasta aquí. La multinacional Bimbo parará la producción de su fábrica de El Verger el próximo 22 de marzo. Los casi cien empleados se irán a casa con un permiso retribuido. El 31 de marzo la empresa ya cerrará y liquidará una planta que ahora cumple 50 años.

Los trabajadores siguen peleando. Son, sin embargo, muy conscientes de que la multinacional es inflexible en cuanto al cierre. No hay vuelta atrás. Acaba el sueño de que la repostería diversifique la economía de la Marina Alta. En los buenos tiempos, las fábricas de Madalenas Ortiz en Dénia y el Verger llegaron a emplear a mil personas (vecinos de la comarca y también de la Safor, sobre todo de Oliva).

Los empleados retoman el próximo lunes las movilizaciones. Realizarán tres días de huelga. El lunes se darán un buen madrugón. Han fletado dos autobuses. Saldrán a las 5 de la mañana con destino a Madrid. Los trabajadores realizarán una concentración entre las 11.30 y las 13.30 ante la sede social de Bimbo en Madrid. Se harán oír allí donde se ha decidido el cierre de una fábrica que es histórica y en la que trabajan empleados jóvenes que se ven abocados a la precariedad.

La empresa, eso sí, está demostrando otro talante en la negociación de recolocaciones en la planta de Paterna y despidos. "No ha dado ningún resquicio a que la fábrica siga abierta, pero sí ha cambiado su postura inicial en cuanto a los traslados y las salidas de los trabajadores. Podemos llegar a un acuerdo. Queremos que los empleados tengan unas indemnizaciones que les permitan afrontar con cierta tranquilidad un presente y un futuro en el que van a tener que reivintarse laboralmente", ha explicado el presidente del comité de empresa, José González.