Dos encapuchados irrumpieron ayer por la mañana en la sucursal de Bankia en Faura y perpetraron un atraco a punta de pistola. Los hechos se produjeron a primera hora de la mañana cuando solo estaban allí los trabajadores, según fuentes policiales.
Los asaltantes exigieron el dinero y, por después, huyeron con lo que había en ese momento en el mostrador.
Para darse a la fuga contaron con la ayuda de un compinche que les esperaba en un coche aparcado cerca. No obstante, ese vehículo fue encontrado más tarde en el mismo término municipal, por lo que todo indica que en ese punto cambiaron de transporte para dar el esquinazo a las fuerzas de seguridad.
El atraco se desarrolló con rapidez y, afortunadamente, no hubo que lamentar heridos, como destacaron en medios policiales. Por los detalles que han trascendido, se sospecha que eran personas españolas que hablaban en valenciano perfectamente.
Todo ocurrió con un «modus operandi» prácticamente idéntico al utilizado en julio de 2012 cuando esa misma sucursal fue asaltada a primera hora de la mañana, como informó Levante-EMV. De hecho, no se descarta que se trate de un golpe perpetrado por los mismos autores pues, hasta ahora, no se había llegado a detener a nadie por aquel asalto.
Al igual que ocurrió ayer, en el atraco de hace dos años, hubo tres encapuchados implicados que huyeron en un coche y luego, en las inmediaciones, cambiaron de vehículo. La diferencia es que, en aquella ocasión, sólo uno de ellos entró en la sucursal con una pistola y los otros dos se quedaron esperándole en la puerta. Entonces, los ladrones se llevaron un botín de 50.000 euros que ayer no se pudo precisar. Tras acudir al lugar junt a la policía local de Faura, la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación.
