La subvención del material escolar que otorga el Ayuntamiento de Petrés para los niños del colegio ha divido a la corporación municipal y a la ciudadanía.
La decisión del gobierno local de subvencionar tanto a los empadronados como a los que no lo están, ha encontrado la oposición del Partido Popular, que propuso en el último pleno que la ayuda sólo la recibieran las familias empadronadas de la localidad.
La propuesta de los populares contó con el respaldo del colectivo de madres que acudieron a la sesión, quienes piensan que los no empadronados cuentan con beneficios sin aportar nada al pueblo, mientras que los empadronados pagan los impuestos de Petrés.
Aunque tampoco son partidarias de que no se les subvencione el material, plantearon la posibilidad de que el porcentaje subvencionado fuera menor que el de los lugareños. «Nosotros vamos a la piscina de Sagunt y nuestros hijos no pagan lo mismo que los empadronados allí; pagan más, no entiendo porque no se hace aquí lo mismo», decía una madre.
El portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de Petrés, Miguel Peruga, explicó que la política de subvenciones se creó con el propósito de potenciar el colegio, y añadió que el objetivo es seguir manteniendo la ratio porque de no hacerlo «podríamos quedarnos sin comedor e incluso, podría haber niños de distintas edades en una misma aula». Peruga también afirmó que «siempre es bueno para la economía de un pueblo que venga gente». Sin embargo, pese a la política de subvenciones , el colegio ha sufrido en este curso escolar un descenso de alumnos, de 120 a 104.
A las palabras de Peruga se añadían las del alcalde, Pere Peiró, quien explicó que lo que al gobierno le interesa es mantener el centro escolar y potenciar que vengan niños». Respecto a beneficiar a unos más que otros, el edil avanzó que las actividades extraescolares que se van a impartir en el polideportivo municipal, tendrán una subvención del 50%, sólo para los niños que estén empadronados en Petrés y no para el resto. Por esta oferta deportiva, los niños deberían abonar 120 euros al año, que con la bonificación del 50% se quedarán en 60 euros, mientras que los mayores deberán pagar 150 euros por el uso de las instalaciones deportivas.
Este cobro, tal como se explicó en el pleno, viene motivado por la privatización del polideportivo, que gestiona ahora una empresa, que se encarga además del mantenimiento de las instalaciones pese a ser éstas municipales.
