La Ruta 99 recorre los 24 municipios de la Comunitat Valenciana de menos de 100 habitantes; una experiencia que permite descubrir la riqueza y los encantos del interior. Se trata de encontrar otra forma de viajar que sorprende por la belleza del paraje y los tesoros que guardan nuestros pueblos.

De norte a sur de la C.Valenciana, la Ruta 99 hace parada en las comarcas que necesitan de mayor visibilidad para frenar la despoblación. Es una alianza con el turismo de interior para provocar un cambio económico en la zona al tiempo que permite mostrar el sinfín de oportunidades en estos 24 municipios. En concreto, la ruta discurre de norte a sur de laC. Valenciana comenzando en la comarca de Els Ports, en Castelló, donde se visita Herbés, Palanques, Vallibona y Villores. En el Baix Maestrat, la ruta discurre por Castell de Cabres, mientras que en el Alto Palancia se puede conocer Higueras, Matet, Pavías y Sacañet. En el Alto Mijares se visita Espadilla, Fuente la Reina, Fuentes de Ayódar, Torralba del Pinar, Torrechiva, Vallat, Villamalur y Villanueva de Viver.

Benimassot y Famorca

Mientras, en la provincia de València, la ruta hace dos paradas. La primera en la Puebla de San Miguel, en el Rincón de Ademuz, y en La Vall d’Albaida se pueden visitar los municipios de Sempere y Carrícola. Por último, en Alicante la ruta se extiende hasta el Comtat, en Benillup, Benimassot, Famorca y Tollos.

Se trata de un proyecto de promoción turística que forma parte de la Agenda Valenciana Antidespoblament 20-30 y gestionado por la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP). Se trata de una estrategia de dinamización turística de estas áreas despobladas donde colaboran distintas administraciones e instituciones de forma conjunta para reactivar estas economías. 

Espadilla, en la ruta 99.

La Ruta 99 se lanzó en enero y desde entonces no ha dejado de sumar nuevas iniciativas más allá del interés propio en los pueblos. Se están realizando viajes en grupo, en moto, en bici o a pie, solos o acompañados. Los visitantes disponen de una acreditación virtual que, a través de la geolocalización, se puede llevar en el móvil, realizan el check in en puntos turísticos señalizados en cada municipio y obtienen recompensas simbólicas en cada etapa. Además, a través de un foro, los ‘ruteros’ pueden dejar opiniones para mejorar los servicios en los municipios. 

Más de 800 personas se han registrado virtualmente en tan sólo solo los meses de mayo y junio, creciendo la participación y el interés por la oferta de turismo de interior en la C.Valenciana. Cabe destacar que el éxito de la Ruta 99 reside en el patrimonio natural, cultural, de gastronomía y costumbres que descubre una gratificante y enriquecedora oferta de turismo responsable con el entorno. Una iniciativa que crece gracias a la interacción de los visitantes, a la participación y el compromiso de las alcaldesas y alcaldes de los municipios.

La Puebla de San Miguel y Villores.

La Ruta 99 incorpora las ventajas de las nuevas tecnologías, no sólo con la geolocalización de la acreditación, también con el seguimiento que a través de su página web y de las redes sociales de rutas, senderos y actividades que se comparten en abierto por los visitantes.