Una gallega entre las cien mayores

HHace 10 años, el periodista del canal de televisión estadounidense Jim Cramer, bautizó como grupo FANG a cuatro empresas tecnológicas que triunfaban en Bolsa: Facebook, Amazon, Netflix y Google. A lo largo de diez años, con cambios de nombres y nuevas incorporaciones, los FANG pasaron a ser FAANG, luego MAMAA y hoy, simplemente, se las conoce como las Siete Magníficas. Se trata de Microsoft, Apple, Amazon, Meta, Alphabet, Tesla y Nvidia. Conjuntamente, su capitalización bursátil suma 13 billones de dólares, 12 billones de euros. Casi veinte veces más que las 35 empresas que integran el Ibex español suman un valor de 637.000 millones.

Solo en un año, Nvidia ha incrementado un 240% su valor en bolsa para encaramarse en la cuarta posición del ránking mundial. Este miércoles, esta empresa especialista en computadores de última generación y desarrollo de Inteligencia Artificial, anunciará los resultados del año fiscal que cerró el 31 de enero. Cualquier cifra que no supere los 20.300 millones de dólares de ingresos y los 10.400 millones en beneficios netos obtenidos en los últimos tres meses será motivo de caída delprecio de la acción.

Las expectativas que existen en la demanda de tecnología para mantener a pleno rendimiento un grupo de compañías lideradas por las ya veteranas Microsoft y Apple, nacidas en 1975 y 1976 respectivamente, forman parte del debate en que están inmersos los analistas bursátiles. ¿Tienen techo? Aquellos que apuntan a su sobrevaloración indican que su PER (ratio que refleja las veces en que el beneficio neto por acción está reflejado en el precio de la acción) es de 45 veces, rozando límites que explotaron con otras burbujas tecnológicas.

Junto a las tecnológicas, EEUU aporta a la lista de las más valoradas al holding inversor fundado y presidido por Warren Buffett, Berkshire Hathaway, y a la farmacéutica Eli Lilly, fabriante del histórico antidepresivo Prozac, y que acaba de lanzar un medicamento antiobesidad. La petrolera estatal saudí Aramco, que sacó a cotizar un 5% del capital, y el fabricante de semiconductores taiwanés TSMC, rompen la hegemonía estadounidense entre las diez primeras.

Salvo la empresa holandesa ASML, fabricante de material para semiconductores, Europa va muy por detrás de EEUU en la presencia de empresas ligadas a las nuevas tecnologías entre los grandes líderes bursátiles. La empresa europea más valorada es la farmacéutica danesa Novo Nordisk, que ha saltado a la posición 14ª del ránking mundial también gracias a sus fármacos para combatir la obesidad y la diabetes. Ha reemplazado como líder continental al grupo de marcas de lujo francés, LVMH, controlado por la familia Arnault. La presencia francesa entre las líderes europeas se completa con la empresa de cosmética, moda y perfumes L’Oréal y la de moda de lujo Hermés.

En junio de 2021, Emmanuel Macron, presidente de Francia, lanzó un proyecto en medio de la pandemia y el nacimiento de los fondos europeos para apoyar inversiones verdes y digitales con el objetivo de que en 2030 haya diez empresas europeas tecnológicas por valor de 100.000 millones. La clave: lograr que las start up europeas, a medida que vayan creciendo, puedan acceder a los fondos financieros necesarios y tengan los apoyos fiscales suficientes para no tener que venderse o trasladar la sede a Estados Unidos o Asia. Solo la holandesa Prosus especialista en ecommerce y que ocupa la posición 100 del ranking, podría adecuarse a los desafíos establecidos por el presidente galo. Hoy vale 121.000 millones de euros,la mitad de lo que valía durante la pandemia.

¿Y las empresas españolas? En otra dimensión. Solo la gallega Inditex, gracias a la revalorización bursátil del 58% logrado el año pasado, se ha podido colar entre las cien empresas con mayor valoración del mundo. A nivel europeo, el grupo presidido por Marta Ortega se sitúa en la posición 18ª, aunque es la primera en el sector de las grandes cadenas de moda. Parece lejos el momento que otra empresa española llegue más arriba.