El director general de Política Educativa de la Generalitat Valenciana, Jaume Fullana, estuvo ayer en el CEIP Gloria Fuertes de Alzira para tranquilizar a las familias. Pero sólo momentáneamente. El dirigente autonómico explicó la metodología educativa que tiene previsto aplicar la conselleria y aseguró que no peligra, de momento, el plan piloto de inmersión que aplica el centro alcireño en inglés. De hecho, confirmó (como también lo hizo en varias ocasiones el alcalde del municipio, Diego Gómez) que los niños y niñas que han empezado con dicha planificación de inmersión en inglés podrán acabar el ciclo hasta sexto curso en dicho plan. Incluso durante el curso que viene (el de 2016-2017) podrán matricularse para cursar la mayoría de las asignaturas en la lengua de Shakespeare.
Eso sí, la Generalitat Valenciana está trabajando en la actualidad «en un plan integral que ofrezca la misma competencia lingüística a los jóvenes en las dos lenguas oficiales del territorio valenciano, es decir el castellano y el valenciano. Eso sí, con una planificación educativa plurilingüe que ofrezca un proceso de asimilación de dos o tres lenguas extranjeras. Creemos que es pedagógicamente sostenible ya que cuenta con sustento científico. El proyecto del nuevo plan lo están elaborando en la actualidad las universidades de Alicante, Valencia y Castellón», explicó el director general educativo durante la asamblea convocada en el colegio de Alzira para apaciguar el creciente malestar de la comunidad educativa por las dudas sobre la nueva política.
Los integrantes de la conselleria están manteniendo reuniones con todos los sectores implicados en la educación con el objetivo de recabar información sobre la situación completa en el territorio valenciano. Han habido reuniones con padres y madres (como la de ayer en Alzira), sindicatos, partidos políticos o profesorado. Con todo, el nuevo decreto educativo está previsto para el curso 2017-2018, que sería cuando afectaría al Gloria Fuertes, ya que se deberá aplicar la educación en las dos lenguas oficiales del territorio valenciano (según lo estipulado ya en el Estatuto aprobado a principios de la década de los ochenta), con la incorporación de otros idiomas extranjeros como el inglés, pero también el francés o incluso el chino.
«El tren funciona»
El alcalde alcireño, Diego Gómez, ha recibido en su despacho a varias familias preocupadas en los últimos meses. Es por ello que quiso organizar la reunión con el representante de la conselleria. En la reunión de ayer afirmó: «Vuestros hijos e hijas han subido a un tren y han ido haciendo camino. Aquí se hace un tratamiento integral de lenguas. El tren sigue funcionando y los escolares podrán acabar el trayecto. No va a haber problema».
Los miembros de la conselleria de Educación han mostrado su voluntad de finiquitar el sistema actual que aprobó el PP en el que se debe elegir entre una línea en castellano u otra en valenciano. Los planes del actual Consell, en manos del PSPV-PSOE y de Compromís, pasan por potenciar el valenciano y el inglés.
