En los últimos años han salido a la palestra grandes jugadores de Villanueva de Castellón. Ricard Sentandreu y su hermano Guillem brillaron primero, para dejar paso después a un Julio Marrahí que llegó a ser el mejor jugador de raspall hace unos años y quedarse con el subcampeonato este curso. Para el futuro inmediato suena un Seve que muestra enormes dotes en cada partida en la que confían en él. El futuro está asegurado. La localidad castellonense ha amado siempre la pilota valenciana y por ello el trinquet ha sido catedral de grandes partidas, tanto de jugadores locales como organizadas con pilotaris llegados de todo el territorio valenciano. El ayuntamiento que comanda Òscar Noguera tuvo que salir al rescate del trinquet, conocido en el mundo del deporte autóctono como «el trinquet de Batiste». Así, la localidad procedió a reabrir un espacio histórico que ha visto jugar y crecer en sus instalaciones a decenas de pilotaris castellonenses. En un principio se optó por hacer una valoración de costes de unas nuevas instalaciones en el polideportivo dedicadas a la pilota, pero estudiadas todas las posibilidades, el proyecto y obras en el centro deportivo habrían costado el doble que la compra y restauración del trinquet de Batiste.

El alcalde, Òscar Noguera, aseguró el día de la firma del acuerdo que la apuesta del actual gobierno «es una voluntad firme por devolver en el pueblo un edificio emblemático que representa un deporte autóctono que ha llevado el nombre de Castelló por todas partes y que ha disfrutado, y continúa disfrutando, de grandes seguidores a este deporte». La reapertura del trinquet supone la recuperación de la memoria y patrimonio histórico, así como el apoyo a la cultura y a un deporte genuinamente valenciano.

El centro deportivo de Villanueva de Castellón se trata de un trinquet de los más antiguos, aunque su última remodelación fue en 1975. Durante las fiestas de la localidad se disputaron allí, durante décadas, algunas de las partidas más destacadas del panorama valenciano. El ayuntamiento procedió a restaurarlo para adaptar las instalaciones a los nuevos tiempos y permitir que todos los aficionados disfruten de nuevo del trinquet, ahora municipal.