La Policía Local de Gandia ha anunciado que a partir del 24 de junio comenzará a sancionar a los conductores de patinetes eléctricos que incumplan la normas aprobadas en el decreto de circulación que la alcaldesa de la ciudad, Diana Morant, firmó el verano pasado. Hasta ese día, los agentes advertirán a los conductores de las normas básicas, que consisten en no poder circular a más de 6 kilómetros por hora (paso de viandante) por vías peatonales, prohibición de ir por aceras de menos de 3 metros de anchura y, sobre todo, no poder subir al patinete a otra persona. El ayuntamiento señala que los principios básicos se están incumpliendo y que se está poniendo en riesgo la integridad de peatones y usuarios de los patinetes. En Gandia es habitual encontrarse con padres y madres que, a la hora de entrar a los colegios, llevan a sus hijos en estos vehículos, algo que está prohibido.

Como norma general, los patinetes de hasta mil watios de potencia se tratarán como tales. A partir de ese nivel ya se consideran vehículos, y sus usuarios deben matricularlos, contratar un seguro de responsabilidad civil, llevar casco y circular por donde van los vehículos.