El colegio Cervantes de Gandia cuenta desde esta misma semana con cocina propia. Las obras de rehabilitación del centro permitieron adecuar un espacio para la elaboración de los platos en el mismo edificio, lo que hace, según explica el director, Paco Sansaloni, que se puedan ofrecer menús de mayor calidad a los pequeños y pequeñas del centro que hagan uso de este servicio.

Hasta el momento, el centro recibía los platos elaborados por una empresa de catering, que la transportaba hasta el centro desde sus cocinas, donde los elaboraba unas horas antes. A partir de ahora, la comida saldrá directamente de la cocina del centro cada día elaborada con productos ecológicos y de proximidad y con menús equilibrados elaborados por los nutricionistas de la empresa del catering.

El confinamiento del curso pasado paralizó su puesta y ya lo largo del presente, el centro ha equipado la cocina con todo lo necesario para elaborar los menús que cada día están dirigidos a unos 160 alumnos y alumnas.

El Cervantes, como remarcaba Sansaloni, era el único colegio de Gandia que no disponía de este servicio y que seguía echando mano del catering para dar de comer a su alumnado. Las obras de remodelación integral que se llevó a cabo en el centro por parte de la Conselleria de Educación han permitido habilitar este espacio.

El colegio Cervantes, ubicado en el barrio de Corea de Gandia, acoge a unos 400 alumnos y alumnas de los ciclos de infantil y primaria y es, actualmente, el último centro renovado en la ciudad de Gandia, aunque ya están en marcha obras en otros como el Benipeixcar gracias al Pla Edificant de la Conselleria de Educación.