Los trámites para la ejecución del proyecto del Gandia Arena, el pabellón deportivo que el ayuntamiento va a levantar en un solar municipal ubicado junto al Campus de Gandia de la UPV han entrado en una fase decisiva. Según ha podido saber este periódico, a finales de este mismo año o durante las primeras semanas del próximo se licitará la obra, lo que significa que los trabajos podrían arrancar durante el primer trimestre de 2023. Según las previsiones se espera que esté finalizada para el 2024. Hace escasas semanas se empezaban a desmontar los huertos sociales que había en esa parcela, a la espera de que próximamente empiecen los trabajos para preparar los terrenos, un contrato que se adjudica de forma separada al de la construcción.

El proyecto fue anunciado a principios de julio del 2021 durante la primera visita que el rector José Esteban Capilla hacía fuera de València tras ser elegido en el cargo, apenas llevaba una semana. Ese día fue recibido por Diana Morant, entonces alcaldesa y que solo seis días después se convertía en ministra de Ciencia e Innovación.

En aquella comparecencia se explicó que sería un recinto para albergar grandes eventos deportivos con un espacio dedicado a la investigación y la innovación que utilizaría el alumnado y el personal del Campus de Gandia de la UPV y precisaría una inversión de 7 millones de euros, que sufragarían de manera conjunta el consistorio, a través de ayudas de la Diputación de Valencia y la Generalitat, y de la institución universitaria, que aportaría un millón de euros.

Ahora se ha dado un nuevo impulso al proyecto, manteniendo la esencia original pero modificando ligeramente las condiciones. Según han detallado a Levante-EMV y confirmado también desde el consistorio, la UPV no realizará finalmente la inversión inicial. El motivo es que, tras estudiar el proyecto, los servicios jurídicos de la UPV han dictaminado que sería irregular que la universidad invirtiera en un pabellón que no sería de su propiedad y que se levantará en suelo municipal.

Eso no significa, sin embargo, que la UPV se salga del proyecto. Las dos instituciones, ayuntamiento y universidad, están estudiando la fórmula en la que la politécnica participará económicamente en el pabellón. Lo más probable es que la ciudad asuma el millón de euros para hacer frente a la construcción del edificio y que, posteriormente, se firme un acuerdo entre los dos organismos para una cesión de uso al alumnado del Campus a cambio del pago de una cuota, canon, alquiler o concepto que se considere más adecuado.

En todo caso, lo único que cambia es la forma en que la UPV participará económicamente en el pabellón, ya que el uso conjunto que se pactó inicialmente sigue intacto y se espera que el Gandia Arena (nombre con el que se presentó en Fitur) sea un referente deportivo, de atracción turística para llenar hoteles fuera de temporada, pero también un polo de conocimiento y de talento gracias al trabajo del personal investigador del Campus.

Esta infraestructura ocupará 6.000 metros cuadrados junto al Campus de la UPV entre la carretera de la Séquia del Rei y la calle dels Degans. Incluirá cuatro pistas múltiples y dispondrá de una capacidad de 3.000 personas. El recinto se ubicará junto al esqueleto de lo que tuvo que ser el Espai Innova y la elección de que se levante en una parcela municipal y no del Campus es para que la universidad disponga de suelo libre en caso de que, en un futuro, quiera construir nuevas infraestructuras para ampliar la sede ubicada en el Grau.