Un aviso de la Fiscalía de Ecuador llevó a la Policía hasta los 3.300 kilos de cocaína

La Policía Nacional detiene a once presuntos narcos en plena descarga en Xirivella, entre ellos a los 'notarios' del clan albanés que importó la droga

Con este cargamento son ya casi siete las toneladas de cocaína detectadas en un mes en el puerto de València

Un agente en busca de 560 kilos de coca en el puerto de València.

Un agente en busca de 560 kilos de coca en el puerto de València. / Policía Nacional

Teresa Domínguez

Teresa Domínguez

Agentes antidroga de la Policía Nacional han detenido a once personas, todos ellos hombres, y se han incautado de un cargamento de 3.300 kilos de cocaína ocultos en la estructura de dos contenedores que llegaron al puerto de València hace casi un mes, en un envío que procedía del puerto de Guayaquil, en Ecuador. Este nuevo mazazo a las redes del narcotráfico internacional que importa cocaína al por mayor desde Suramérica a Europa utilizando los muelles valencianos es fruto de la colaboración entre las fiscalías antidroga de Quito y de València.

Según la información a la que ha tenido acceso Levante-EMV, esta nueva operación antidroga ha sido llevada a cabo por agentes de la unidad de drogas y delincuencia organizada (Udyco) de la Policía Nacional de València tras detectar la llegada de cuatro contenedores con una carga declarada de azúcar que procedían de Ecuador y habían sido embarcados en un buque mercante en el puerto de Guayaquil.

La Fiscalía antidroga de Quito dio el aviso

Esa detección fue posible después de la alerta lanzada por el fiscal antidroga de Quito, que permitió a la Fiscalía antidroga de València ordenar una entrega controlada, esto es, vigilar en todo momento en contenedor para atrapar a los narcos en el momento en que se hicieran cargo de él.

Así las cosas, una vez descargados los contenedores en el puerto, fueron inspeccionados por agentes de la Policía Nacional y de Aduanas con ayuda del escáner fijo instalado en la zona sur del recinto portuario, inspección en la que confirmaron la información llegada de Ecuador, ya que detectaron que, además de la carga legal, se observaban cientos de paquetes con aspecto de ladrillo como los que suelen tener cocaína, que se encontraban apilados dentro de la estructura de al menos dos de los contenedores que habían sido trucados con dobles fondos.

Un mes bajo vigilancia

En ese punto, los agentes continuaron con la investigación hasta que, esta última semana de noviembre, cuando el azúcar llevaba un mes 'aparcado' en el puerto sin que nadie se interesase por la carga, una empresa española acudió al puerto para hacerse cargo de la mercancía.

Los contenedores fueron despachados bajo la vigilancia de los agentes de la Udyco que arrestaron a los sospechosos cuando ya habían abierto con radiales el doble fondo de ambos depósitos y estaban extrayendo los paquetes de cocaína en una nave industrial de Xirivella.

Quinto golpe al narco en un mes

Este nuevo golpe a las redes internacionales del narcotráfico se suma a otros cuatro propinados por la Policía Nacional y la Guardia Civil, por lo que es el quinto en algo más de un mes, entre mediados de octubre y finales de noviembre.

El primero de ellos, llevado a cabo por agentes de la Udyco de la Policía Nacional, permitió recuperar 210 kilos de cocaína camuflada dentro de dos piezas grandes que formaban parte de un envío de chatarra procedente de Panamá. La droga fue confiscada cuando los presuntos narcos -hubo siete detenidos- la descargaban en una nave industrial de Villarrobledo (Albacete).

La moda de los contenedores con doble fondo

El siguiente alijo, de 1.561 kilos de cocaína, fue confiscado también por la Udyco en València, dentro de la estructura metálica de un contenedor a principios de noviembre, pero en ese caso no se produjeron detenciones.

El día 8 de este mes de noviembre llegaba la tercera operación, igualmente de la Udyco y con cuatro detenidos, tres hombres y una mujer. Como en el caso de Villarrobledo, la cocaína, 561 kilos, fueron recuperados del interior de seis cilindros metálicos que formaban parte de otro envío de chatarra procedente también de Panamá y que fue descargado en una chatarrería de Almassora cuyo dueño es uno de los arrestados.

Por último, agentes del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de València detenían hace apenas diez días a ocho hombres, siete españoles y un albanés, cuando recuperaban 600 kilos de cocaína ocultos en el doble fondo de un contenedor vacío en una terminal logística de Quart de Poblet, tal como adelantó, también en exclusiva, Levante-EMV.

En ese caso, uno de los presuntos narcos perdió un pulgar cuando trataba de huir de los agentes, que les sorprendieron de noche, en plena descarga de la droga.

Casi 6.300 kilos en poco más de un mes

Con este nuevo cargamento ya son casi siete las toneladas de esta droga que las fuerzas de seguridad sacan del mercado negro tras haber accedido a través del puerto valenciano, el tercero con más incautaciones de cocaína de toda Europa, por detrás de los de Amberes y Rotterdam. Hasta hace una década y desde principios de este siglo, el puerto de València ha sido la principal puerta de entrada de la cocaína suramericana al mercado europeo, o, al menos, aquel en el que más droga de este tipo se incautó a lo largo de una década larga.