El narco Roberto Vega asesinado en el Saler huyó de Colombia con documentación falsa

El cabecilla del clan de los Vega Daza, acribillado a balazos junto a dos compatriotas, utilizaba un pasaporte a nombre de Janer Villalobos

Levantamiento de los cadáveres de Roberto Vega y sus dos socios asesinados en el Saler.

Levantamiento de los cadáveres de Roberto Vega y sus dos socios asesinados en el Saler. / Fernando Bustamante

El hermetismo en la investigación por el triple asesinato a tiros del Saler en la noche del pasado martes, más aún después de que el Juzgado de Instrucción número 14 de València –encargado del caso– acordara el secreto de las actuaciones, apenas ha permitido conocer datos nuevos sobre cómo se produjo el tiroteo y las posteriores pesquisas del grupo de Homicidios de la Guardia Civil. Pero lo que sí ha trascendido han sido los pasos que dio el narco Roberto Vega, del clan de Barranquilla de los Vega Daza, una de tres víctimas mortales y supuesto principal objetivo de los asesinos, hasta llegar a València.  

Al parecer, el conocido narco utilizaba documentación falsa a nombre de un tal Janer Villalobos, que consiguió tras su paso por la ciudad venezolana de Maracaibo. Se desconoce si en el momento de ser abatido a tiros, uno de ellos en la cabeza (para asegurar su muerte), el líder de los Vega Daza portaba dicha documentación encima.

Documentación falsa utilizada por el narco Roberto Vega, asesinado en el Saler.

Documentación falsa utilizada por el narco Roberto Vega, asesinado en el Saler. / Levante-EMV

El triple crimen, que adelantó Levante-EMV en su edición digital, se produjo sobre las 21.15 horas del martes, cuando una vecina que regresaba de comprar vio en el aparcamiento situado entre cuatro bloques de apartamentos del Saler dos cadáveres junto un Volkswagen Passat con las puertas abiertas. La mujer alertó al 112, que envió al lugar patrullas de la Policía Local y de la Guardia Civil.

Ningún vecino escuchó detonación alguna, pese a que se llegaron a efectuar más de una quincena de disparos a corta distancia. Todos alcanzaron objetivo, salvo uno de los tiros, que impactó en una puerta. En el interior del coche se encontraba una tercera persona muerta.

En la inspección ocular y posterior levantamiento de los cadáveres la Guardia Civil no localizó arma de fuego alguna, lo que no implica que las víctimas fueran desarmados, pues sus presuntos asesinos tuvieron tiempo material de sobra para habérselas llevado.

Todo indica que los asesinos tenían bajo vigilancia a sus objetivos y controlaban sus movimientos. De hecho, Roberto Vega y sus dos socios, Harold J. R. y José S. L., acababan de bajar de un piso de la torre de apartamentos que tenía alquilado uno de ellos desde hacía unos meses, cuando fueron sorprendidos en el momento en el que estaban subiendo al vehículo.

El citado coche ha sido analizado palmo a palmo por los expertos de Crimalísticaen busca de vestigios de los presuntos asesinos que aporten luz al caso.

Agentes de Criminalística y el forense proceden al levantamiento de uno de los cadáveres del triple crimen del Saler

Ignacio Cabanes

Fuegos artificiales

La muerte a tiros de Roberto Vega fue recibida por sus enemigos con júbilo en Barranquilla (Colombia). Desde pintadas en la casa de la familia de los Vega Daza con un claro mensaje: «Game over Los Vega», hasta incluso con fuegos artificiales durante dos noches seguidas.

Entre los principales sospechosos que podrían haber encargado el asesinato del narco colombiano que había extendido sus redes ahora en València figura Álvaro Luis Ospino, apodado la ‘Negra Dominga’, aunque no es el único y por el momento se mantienen abiertas varias vías de investigación.

Ospino juró que mataría a toda la familia Vega Daza cuando en una fiesta de cumpleaños, en octubre de 2022 en Punta Roca –localidad de la costa colombiana–, un tiroteo protagonizado por el clan rival acabó con la muerte de un protegido (su sobrino) del cabecilla de los Costeños.

Ese parece ser el inicio de la sangrienta guerra entre ambos clanes del narcotráfico, que vivió su jornada más negra el 29 de junio del pasado año, en Villa Campestre. Sicarios que fueron relacionados con Los Costeños habrían sido los autores de los asesinatos con fusiles de asalto y munición de guerra del padre del ahora asesinado en el Saler, ‘Kike’ Vega, y de sus hermanos Ray Jesús y Ronald Iván Vega. Roberto Carlos sobrevivió al ataque. Hasta que ha sido localizado de nuevo y presuntamente ejecutado en tierras valencianas.