Es posible que a estas alturas del año te estés preguntando cómo has llegado hasta aquí. Eso si es que te acercas a tus días de vacaciones. Si no, la pregunta más común, ya entrados en calor, y con el cansancio acumulado es en estas fechas es: ¿cómo voy a llegar a las vacaciones?

El agotamiento, la ansiedad por rendir hasta el último día lectivo y sacar adelante el trabajo se va apoderando poco a poco de muchos de nosotros y eso se traduce en un malestar y una fatiga que no parecen tener fin. Pero, además, a quien más y a quien menos, le abruman también las responsabilidades veraniegas, sobre todo, si hay menores a nuestro cargo. En otras ocasiones, los conflictos familiares que surgen en torno al destino de descanso, la organización y el presupuesto nos producen tanto o más estrés que el día a día cotidiano. ¿Y si te planteases el verano de otra manera? Quizá ha llegado la hora de otro tipo de descanso, no sólo físico, sino también mental. O, por decirlo de otra manera, de un reseteo mental que te conduzca a unas verdaderas vacaciones.

Terapia individualizada

La psicología ha superado hoy su función primordial, que es dotar a la persona de las herramientas básicas para superar sus problemas personales desde el autoconocimiento. Al acudir al psicólogo nos desarrollamos también emocionalmente y crecemos como individuos, lo que nos reporta bienestar.

Terapia de grupo

La terapia de grupo puede ser un buen aliado en determinadas situaciones personales, en las cuales compartes experiencias parecidas con las otras personas, por lo que el apoyo y comprensión del grupo es terapéutico en sí mismo. Para ello es esencial, que la personas de valor a estos beneficios, y que se siente cómodo en grupo.

Meditación

Muchas personas tienen problemas para practicar la meditación ya que no consiguen controlar la respiración. No es difícil, en este sentido, que ocurra lo contrario: que al observar nuestra propia respiración nos pongamos nerviosos. Para solventar esta situación, es recomendable practicar la respiración diafragmática, lo que, además de servirnos para meditar, nos ayudará a equilibrar cuerpo y mente.

"Coaching"

El verano puede ser una época para iniciarse en el coaching. Un proceso breve de coaching es «muy potente», ya que ayuda a la persona a tomar conciencia sobe sus posibles áreas de mejora y facilita el ponerse nuevos objetivos, y llegar a conseguirlos. Permite dedicar un tiempo a reflexionar sobre uno mismo y ponerse en acción hacia dichos objetivos.

Sea cual sea tu preferencia, no desaproveches tu tiempo e inviértelo en el descanso verdadero. Decide y actúa. Recuerda: son tus vacaciones.