El último eclipse solar del año cierra el mes de la moda sostenible en València con el fin de semana más luminoso para el sector de la industria de la moda valenciana en mucho tiempo..

Este fin de semana se celebra no uno, dos festivales de moda. Cada uno con su abanico de colores y ambos bajo el paraguas de la moda. El Clec Fashion Festival se inicia hoy y culmina mañana. Esta segunda fecha la comparte con la Mediterránea Fashion Week, que se celebra sábado y domingo. 

El CLEC Fashion Festival vuelve con una tercera edición repleta de diseñadores consolidados, emergentes, noveles, sostenibles, ucranianos, gastronomía, música en directo, sesiones de fotos y fashion talks. Este año, el Clec apuesta por el rosa como dress code y obliga así a sus asistentes a vestir de rosa o con un toque rosa. Este es uno de los colores protagonista de la moda en la actualidad y el color de la temporada otoño-invierno de este 2022. El rosa también representa el mes de octubre y su causa más luchada: El cáncer de mama. Aunque en realidad, el color original para dar visibilidad a la enfermedad fue el color melocotón y el rosa se ha convertido en un símbolo del capitalismo, que muchos movimientos sociales en las redes indican es ‘para incrementar las ventas. 

Sin duda, es un color controvertido y que no es para todos los públicos. Al igual que el Clec, cuya organización busca siempre salirse de los márgenes al crear un ambiente rompedor y joven. Sin duda, este color presenta un reto, pero también una victoria asegurada. Así lo demostró el director creativo de Valentino, Pierpaolo Piccioli, quién tiñó completamente de rosa el escenario de su desfile en Le Carreau du Temple durante la Semana de la Moda de París para presentar su última colección totalmente rosa. Lo hizo con el tono «Pink PP» de Valentino, un tono magenta brillante creado por Piccioli en colaboración con Pantone. «De carácter experimental y profundamente humano que realza la individualidad y captura valores y sentimientos», así lo describió el diseñador. Un color puede unificar, y dividir. 

Desfile de moda del festival CLEC de la diseñadora Dolores Cortes GERMAN CABALLERO

Los códigos de vestimenta suelen crear una necesidad de compra a aquellas personas que no disponen de un artículo de estas características en el armario. Aun que siempre quedan las opciones de segunda mano, vintage, o incluso prestado. Lo más recomendable siempre será emplear esta sugerencia como un reto y desempolvar esa prenda o complemento rosa del fondo del armario y jugar con los colores, texturas y diseños del resto de tu repertorio para crear un outfit que jamás hubieras llevado. Además, es un color que proporciona mucha información y con gran personalidad que no pasa desapercibido, basta con un simple pañuelo para cumplir con las expectativas estilísticas y sostenibles del presente de la moda. 

Nadie se espera las imágenes y momentos que dejará el Clec tras arrasarlo todo y pintarlo de color de rosa. De momento, ya ha sacado un color tan atrevido para los y las amantes de la moda de los miércoles. El color, marcado por la película adolescente por excelencia, Mean Girls (2004), y su célebre frase «On Wednesdays we wear pink» (los miércoles nos vestimos de rosa), dejará huella en la moda valenciana para el resto de los días. La elección en realidad se basa en la Pink Factory de Andy Warhol y aprovechó la ocasión para realizar la presentación en el Ateneo Mercantil, donde se haya la exposición ‘Andy Warhol Super Pop’. 

El festival pide que se vista con una prenda rosa Urban

Bajo el lema #ClecLovePink, su director Miquel Suay y el presidente de la Diputación de Valencia, Toni Gaspar, presentaron el evento y garantizaron su compromiso con la tecnología, la sostenibilidad, los jóvenes talentos, la creatividad y la situación en Ucrania. La moda no debe ser parcial ante la situación del mundo. La moda es, viste a la política y forma parte de la sociedad. Durante el acto, Miquel Suay, diseñador y director del Clec Fashion Festival, hizo referencia al compromiso social y solidario del festival. Amplió este sentido hacia la búsqueda de la sensibilización y concienciación en valores de sostenibilidad. «La industria de la moda es la segunda más contaminante a nivel mundial», una sentencia convertida casi en una de las frases más repetidas en el sector, y que corre peligro de ser normalizada. 

El pink es el espíritu del festival porque ante la coyuntura política, la pandemia o la crisis climática

El pink es el espíritu del festival porque ante la coyuntura política, la pandemia o la crisis climática, aporta exponer la realidad y teñirla con la positividad, esperanza y humanidad que aporta el color. Suay defendió su mensaje como la ‘antítesis’ del blanco y el negro de Balenciaga. Lo que recuerda a la escena más viral de la película de Ruben Östlund, premiada con la Palma de Oro en el Festival de Cannes 2022. En la escena, la sátira retrata a un periodista sensacionalista que dirige una audición de decenas de jóvenes hombres. Para seleccionarles, les exige que varíen sus expresiones faciales al son de los valores de marca en una crítica contra el capitalismo, la moda rápida y el lujo.

Si se habla del porvenir, destaca la inversión de la organización del Clec, que este año resuena en el metaverso. El mañana del sector es la moda digital, ya lo ha demostrado los videojuegos y e-desfiles celebrados durante la pandemia. El formato electrónico incluso conquistó a los fashion films y abrió el debate de si la moda y las fashion weeks se trasladarían a la nube. Un formato más sostenible pero que todavía presenta un reto de consumo energético. El Clec decidió crear un formato entre los dos mundos y ofrecer el metaverso en el propio evento para abrir diálogo entre ambos y poner un pie de lleno en el futuro.

Mañana sábado, la moda resonará al unísono en el sur de València. Más allá del Hemisfèric, donde se celebra el CLEC Fashion Festival, en el Cabañal y con vistas al mar, se celebrará la Mediterránea Fasion Week. Los medios de comunicación hicieron eco de la simultaneidad de los festivales nada más salir la noticia hace poco menos de un mes. Los titulares se llenan de palabras de duelo o batalla. En la escena de la moda valenciana también resuena la división que esto implica. Sin embargo, en los sectores creativos es imposible evitar este dúo entre el blanco y el negro; lo nuevo y lo viejo; lo transgresor con la tradición; seguir las tendencias o revalorizar los clásicos. Aun que en el caso de la moda, esto ocurre sin precedentes, sobre todo en Valencia, donde su historia remarca como imposible unificar a los diseñadores y las diseñadoras. Lejos de generarse una contienda, debe imperar la convivencia. Una coexistencia cuyo contraste de como resultado una suma de talento que sume, y nunca reste. 

Las causas parecen claras para las voces más críticas que apuntan a la clara división de la moda valenciana que lleva a la imposibilidad de unificar la industria valenciana en un evento. Una división que hace cómplice a las personas valencianas, ya que deben elegir a cuál de los dos eventos asistir. O no. Las dos vertientes ofrecen un resultado tan dispar que casi no es necesario elegir, están destinados a públicos objetivos diferentes en su mayoría.

Reconocidos diseñadores

La Mediterránea Fashion Week (MFWV) ofrece una visión más ligada al lujo y tradición de la moda y la aleja de la experiencia inmersiva que supone el Clec. El mismo espacio en el que se celebra proyecta los valores de la MFWV. En Salón Neptuno y bajo la organización de organizado por Acumova (Asociación para la promoción de la Moda y la Cultura valenciana), cuenta con la presencia de reconocidos diseñadores de moda como Modesto Lomba, Angel Schlesser, Isabel Sanchis o Alejandro Resta, entre otros. Sanchis es el nombre que más llama la atención en este cartel, ya que acudió a las dos últimas ediciones del Clec. La diseñadora decidió cambiarse a esta otra apuesta de la moda. Una edición que también puja por la gastronomía, pero en esta ocasión se centra en la belleza y se liga al mundo del SPA y los tratamientos. Todo apunta a que esta semana de la moda se centrará más en el sector fiesta de la industria.

El mes de octubre ha aportado más moda que las últimas décadas juntas. La organización València Capital Mundial del Diseño apostó por este sector al designar el mes como el primer mes de la moda sostenible, Future of Fashion. El Future of Fashion ha llenado la ciudad con una agenda satélite que se prolonga a las primeras fechas de noviembre y tuvo su pico en un evento académico internacional. Durante las conferencias se alertó de que, si requiere disfrutar de un futuro de la moda, la sostenibilidad debe ser el presente. Las Semanas de la Moda de todo el mundp están en el punto de mira de los grupos más ecologistas del sector por su gran contaminación, impacto en huella de carbono y desperdicio de materiales. El Clec contrarresta y amplía su oferta sostenible con la etiqueta de diseñadores ‘sostenibles’, un paso más al que se suma a una ciudad llena de diseño y sostenibilidad. 

Miquel Suay mostrará su nueva colección EDUARDO RIPOLL

Valencia cuenta con proyectos como Moda+Sostenible, grupo creado en 2021 para crear un espacio de encuentro, reflexión, análisis y coordinación de los diferentes actores del sector. La colaboración es imprescindible para identificar retos, fortalezas y necesidades que contribuyan al desarrollo de los objetivos sostenibles y es el punto de encuentro en el que deben coincidir estos dos festivales de moda que se avecinan. Las jornadas del Future of Fashion, celebradas el 5 y 6 de octubre en Las Naves y La Mutant se realizó el primer encuentro que juntó a académicos, empresarios y diseñadores de gran referencia en sostenibilidad de todo el mundo con estudiantes. La directora de estrategia de la Fundación H&M, Christiane Dolva, puso en relieve la importancia de sinergias como esa en la industria de la moda. Otras empresas y marcas como RÆBURN y REDRESS visualizaron en València una gran oportunidad para un futuro más sostenible y acudieron sin dudar el evento impulsor del Pacto por la Moda Sostenible. El diálogo no ha acabado aquí, el 2 de noviembre se celebra en la Universitat Politécnica de València una jornada sobre los nuevos proyectos textiles europeos para una nueva economía. Valencia está de moda y está en el punto de mira con la ayuda de la expansión de la industria, festivales como los que tendrán lugar este fin de semana y la capitalidad otorgada por la World Design Capital Organization. 

El futuro del sector se encuentra en la capital y es su industria la que tiene el poder que cambiarla. Jeanologia, Aitex o The Circular Project son algunos de los nombres que resuenan en las calles valencianas y todos son punteros y referencia en sostenibilidad a nivel nacional e incluso internacional. Valencia Capital de moda -sostenible- es posible. Es trabajo de su industria aprovechar el auge del sector, implementarlo y hacerlo propio, sobre todo en el mundo de los desfiles. Y empieza hoy con el rosa.